Me ha causado mucha gracia leer los comentarios sobre el regreso de Emilio Izaguirre a un club histórico en Escocia, tal como es el Celtic.
Emilio Izaguirre vuelve después de dos años fuera del club que lo despidió como ídolo y lo recibió como leyenda, resulta que los hondureños son “perros” para criticar y menospreciar a los jugadores por su edad.
No hacen falta los típicos: ¡”Cuete” quemado!, “Ya no da más”, “Es un viejito”, “Que tontos los del Celtic”, etc. Resulta increíble que los mismos hondureños nos hacemos sombra por pura envidia de no tener algo con qué brillar, entonces resulta más fácil echarle volquetadas de tierra al vecino o al que le está yendo bien en otro pais.
Así como a Emilio, quien apenas tiene 32 años, con su condición física, bien llega a jugar de tres a cuatro años más.
Y no me extrañaría que esté en el proceso selección rumbo a Catar 2022, que dicho sea de paso hay que recordarle a la Penafuth que ya estamos a escasos cuatro meses de terminar el año y aún no tenemos director técnico, una pena nuestros directivos.
¡Emilio, seguí adelante papá!
