En otro país, el asesinato de José de los Santos Sevilla hubiera provocado una ola de protestas. Pero acá en Honduras estamos más preocupados en Elsa Oseguera, CR7 y Messi, y Maluma.
Porque así somos los hondureños, desconocedores de nuestra propia sangre, con pereza para cultivarnos, los cambiadores del mundo en las redes sociales.
Si hubiera sido un atentado en Europa o en Estados Unidos, otra historia sería. Es como si dijéramos “Asesinaron a un tolupán… ¿Y qué?”.
¡Qué terrible nuestro desconocimiento!
José era líder de la etnia Tolupán y fue asesinado a balazos en la madrugada del viernes en la Montaña de la Flor.
Según información preliminar, al menos cinco delincuentes se introdujeron a su casa y le dispararon hasta quitarle la vida.
Era un buen amigo… Le pido el apoyo al presidente Juan Orlando Hernández para que ordene que se dé con los culpables -dijo Alexander Rodríguez, alcalde de Orica.
Desde ya podemos decir que será otro asesinato que quedará en la impunidad…