Asesinatos en Honduras: “Seguro que andaban metidos en algo”

Por LUIS CHÁVEZ/escritor y caricaturista

 

Ni Sherlock Holmes se echa una conclusión tan rápida y certera como la que nos volamos nosotros frente a un nuevo asesinato: “seguro que andaba en algo”.

Caímos en la trampa (creo que somos tontos) y cargamos en la bolsa la susodicha frase que clavamos a diestra y siniestra a las cientos de víctimas que la ola criminal nos lanza a diario.

A gente inteligente y preparada he escuchado hacer sus “brillantes” análisis, armando las piezas para que todo concuerde con su inyectada teoría de que a la gente que no anda en nada, no le pasa nada.

Y tal vez es el mecanismo de defensa que usa la gente para sentir esa falsa sensación de seguridad frente al horror de los crímenes: “si con nadie me meto, nada me va a pasar”.

Pero si a algún sicario o asesino potencial o narco impune se le mete acabar con alguien, una vez muerto ese muerto “seguro que andaba en algo”.

Pues sí, porque todos andamos en algo, o podemos andar en algo que le moleste a un criminal: somos la competencia en un negocio, no pagamos el impuesto de guerra, le caímos mal, nos fuimos en la balacera, luchamos contra alguna injusticia, sabemos algo que no quieren que se sepa, vimos algo por accidente, defendimos a alguien, obstruimos el paso de algún carro, piropeamos a alguien, lo que sea…

Dejemos de jugarle el juego a quienes beneficiamos siendo tan elementales, tan tontos y dejemos de tirárnosla de detectives.

Exijamos que el sistema de justicia tenga un robusto departamento de investigación y que averigüen por qué matan a la gente, para saber en qué andaban, pero sobre todo para saber en qué andan sus asesinos y conocer sus nombres y apellidos y condenas.