El larguísimo, peligroso y casi clandestino viaje de casi diez horas de Tegucigalpa a Trujillo se redujo a la mitad gracias al Corredor Agrícola, una obra que ha dejado belleza este tramo carretero.
Esto no sólo tendrá un fuerte impacto positivo en la economía, sino que además dará a conocer a Olancho con sus destinos turísticos, entre ellos están la Reserva de la Biosfera del Río Plátano y los parques nacionales de Patuca, Sierra de Agalta, La Muralla, Cuevas de Talgua y El Boquerón, entre muchos otros.
El Corredor Agrícola, que tiene como objetivo primordial mejorar la infraestructura vial del país, potenciar el desarrollo agrícola en base a una estrategia nacional con vistas a impulsar el crecimiento del sector en forma equilibrada, sostenible y responsable, tiene un costo aproximado de 1,712 millones de lempiras y beneficia a más de 1 millón 600 mil habitantes,
Los tramos en que se divide este ambicioso corredor son: Tegucigalpa–Catacamas sección III Río Dulce-Limones, con una longitud de 69.71 kilómetros, y San Francisco de La Paz-Gualaco, tiene una longitud de 30.7 kilómetros; ambas están a cargo de la Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos (INSEP), a través de la Dirección General de Carreteras.
La sección Gualaco-San Esteban mide 42.02 kilómetros y San Esteban-El Carbón tiene una longitud de 41 kilómetros
El tramo de El Carbón-Bonito Oriental mide aproximadamente 45.60 kilómetros; se encuentra en ejecución con un avance físico del 89 por ciento.
En el tramo de Bonito Oriental-Corocito se realiza una rehabilitación de 8 kilómetros de carretera.
Este proyecto genera más de mil empleos, teniendo como propósito mejorar el tránsito de mercancías y pasajeros para el norte, sur y oriente del país y también será de beneficio para el mercado nicaragüense, ya que en 7 horas sus productos estarán en Puerto Castilla.
“Esto convertirá al país en un Centro Logístico de las Américas y nos permitirá competir a nivel mundial”, señala el presidente Juan Orlando Hernández.
