En Turquía tratan mejor a los perros que a los humanos en Honduras

No sé si la fotografía de unos perros callejeros en Estambul, Turquía, a los que se les permite dormir dentro de un centro comercial con cobijas y comida, sea reciente, pero la misma se ha viralizado a través de las diferentes redes sociales. Lindo gesto, ¿no?

De igual forma se han viralizado imágenes de lo que deben pasar los familiares del Hospital Escuela de Tegucigalpa, Honduras, seres humanos que deben soportar dormir en un pedazo de cartón en las sucias calles que rodean el centro médico, sin importar si hace frío, o si han comido, es la única opción para ellos pues sus recursos son limitados, son personas que generalmente vienen de ciudades, pueblos y caseríos cercanos a la capital.

¿Qué cosas, no? Mientras en otros países se busca dar un trato digno a los perritos callejeros, por estas “Honduras”, ni nos preocupamos por esas personas que exponen su salud, su vida y su dignidad, que a aparte de sufrir por la enfermedad que adolece un ser querido, deben buscar un rincón de las frías y sucias calles del hospital para poder pasar la noche.

¿Pero qué pueden hacer? Es lo único que les queda, sin dinero o alguien que les dé posada y claro, sin hospitales con condiciones para que por lo menos pudieran estar en una “sala de espera” o al menos en un lugar con sillas y techo.

¿Y qué pasa cuando llueve, como hoy? ¿O cuando entran estos frentes fríos con vientos que son capaces de arrancar rótulos o botar árboles?

No me lo puedo ni imaginar, gracias a Dios, la vida, la suerte o lo que sea, nunca me ha tocado sufrirlo, ¿y usted podría imaginarlo?

Pues de repente y como estamos en tiempos de campaña política, llegan un par de aspirantes a “la guayaba” y llevan algunas colchas y comida, bien por estas acciones, pero lamentablemente no es suficiente, esto no acaba ni mata este mal de manera estructural, solo lo merma por un par de horas o días.

Bueno, ¿y qué hacemos? Decidí pedirle ayuda a mis amistades de Facebook para ver cómo podemos poner un granito de arena y la situación no es tan sencilla.

Para acabar con esta situación de raíz se necesitaría crear un albergue para familiares que esté cerca del Hospital y que tenga condiciones adecuadas para que las personas puedan pasar la noche, esto implica dinero y un equipo que lo administre.

La opción de un albergue dentro del mismo HE es difícil debido a que se pueden incumplir las condiciones de salubridad que el hospital exige propiciando que los mismos parientes terminen enfermándose o propiciando que los mismos por falta de educación e higiene en el tema hospitalario contaminen y dañen algunas zonas del centro médico.

Por los momentos, desde el Hospital nos indican que ya está planeado y presupuestado la construcción de una sala de espera para 150 personas con una inversión de 5 millones de lempiras, queda por esperar si en la misma se permitirá que esperen de noche a aquellos parientes con enfermos de gravedad ya sea internos o que llegan para alguna operación o tratamiento de emergencia.

A corto plazo lo invito a que cuando pueda se dé una vuelta, con alguna manta o almohada, café o algo de comida, estas personas que día a día son diferentes se lo agradecerán.