Por RAMÓN LÓPEZ P.
Una nueva víctima de un fusil militar. Una nueva bala disparada por un uniformado que acaba con la vida de otro hondureño. ¿Cuántas asesinados van: 10, 18, 20, 27?
El vídeo desgarrador fue publicado ayer por Radio House. Allí se ven los últimos momentos en la vida de Cristian Fúnez, de 26 años, que se manifestaba contra la declaratoria oficial del Tribunal Supremo Electoral que da a JOH como ganador de las elecciones del 26 de noviembre.
“Los Policía Militar andan con las armas y la orden de matar, en esta dictadura la orden es matar al pueblo y ellos seguir robando a sus anchas”, escribió un primo de la víctima.
Pero muchos medios han querido ocultar lo sucedido escribiendo que “De un golpe murió manifestante”… ¡O sea! ¿Se cayó de la cama? ¿Se resbaló en un acera? ¿Le dieron un botellazo? ¡No! Fue un balazo que disparó uno de los militares que estaba en el pelotón que llegó a desalojar a los manifestantes.
Cristian fue alcanzado por un proyectil en la cabeza y cayó a una orilla del bulevar del este y de inmediato empezó a expulsar sangre por la boca. En un intento por salvarle la vida, sus compañeros le colocaron bocabajo pero fue imposible salvarle la vida.
Según el Comité de Familiares Detenidos Desaparecidos de Honduras (Cofadeh), hasta el momento han sido asesinadas quince personas en medio del conflicto político originado desde el 26 de noviembre. Otros organismos, sin embargo, hablan de veinte y hasta treinta asesinados.
Un documento de Cofadeh establece que de esas 15 personas, trece de ellas murieron asesinadas por la represión en las protestas y aplicación de la suspensión de las Garantías Constitucionales; 51 resultaron heridas, siete de ellas gravemente; 844 resultaron detenidas de las cuales 148 personas fueron acusadas por el delito de Robo Agravado, 3 por terrorismo y 91 expedientes penales han sido abiertos en Tegucigalpa, La Ceiba y San Pedro Sula.
Los asesinatos se registraron en las ciudades de Tegucigalpa, Francisco Morazán; Choloma, Cortes; Olancho; La Ceiba, Atlántida; Agua Blanca Sur y Olanchito ambos en el departamento de Yoro.
Sin embargo, no contabiliza a dos policías que fueron emboscados en Olancho. El número de víctimas en incierto, pero lo que sí está claro es que armas oficiales están asesinando en las calles y que debe efectuarse una investigación seria para que los culpables vayan a dar a la cárcel.
