Luis Chávez es una de las mentes más brillantes de San Pedro Sula. Por eso, nadie mejor que él para ser alcalde de esa ciudad tan bella, pero con tantos problemas, entre ellos, la nada envidiable fama de ser uno de los lugares más peligrosos del mundo.
Si a su inteligencia le sumamos su honradez, su creatividad y su forma de ver la vida, Luis, que de paso es un artista genial, tiene todos los méritos para ganar, pues no es un candidato “de caricatura”.
¿Qué hace un caricaturista metido a candidato a la alcaldía de San Pedro Sula por el movimiento de Eduardo Martell?
Lo mismo que haría un ingeniero, un doctor, un albañil o un cantante de rancheras honesto y cansado de que la clase política haya llegado al nivel de descaro en que ya no disimula que lo único que le interesa es solventar sus interminables necesidades económicas: buscar tomar las riendas del poder para permitir el acceso de gente honesta y con deseos de trabajar por el bien común.
¿No teme que esto lo “quemará”?
Si uno ve que su casa está efectivamente agarrando fuego y uno desea salvar la casa y las cosas que están dentro y se decide a apagar el fuego a como dé lugar, hay altas probabilidades de recibir una quemada.
¿No cree que podría perder la credibilidad?
Es un riesgo que camina en dos vías: si yo abandono la coherencia que he mantenido durante dos décadas y me alejo de mis principios, perderé la credibilidad, pero también puede darse por un juicio ligero de quienes me adversen por estar en este partido o porque odian a los políticos, pero en el segundo caso sería injusto, si yo demuestro que me mantengo firme con mis acciones en lo que siempre he profesado.
FOTO: Las caricaturas de Luis Chávez son valientes, atrevidas e ingeniosas.
¿No es de loco lanzarse como candidato a alcalde de una de las ciudades más violentas del mundo?
La auténtica locura es quedarse quietos sabiendo y viviendo la gran cantidad de problemas que tiene nuestra ciudad y también sabiendo del enorme potencial que tiene para solventarlos y salir adelante. Todo sampedrano debería estar dispuesto a involucrarse en esto.
¿En tres palabras, cómo es la San Peter de hoy?
Bella pero estancada.
¿En tres palabras, cómo sería la San Peter de Luis Chávez?
Prosperidad para todos.
¿Se ajusta el Partido Liberal, conservador como es, a sus ideas progresistas?
El Partido Liberal como institución debe ser progresista, está en sus fundamentos; quienes lo han hecho conservador son los miembros de una cúpula que no simpatiza con los principios con que se fundó el partido. A quienes hay que ajustar es a ellos.
¿Cómo puede ser liberal luego de su propio partido participara activamente en el golpe militar a Mel Zelaya?
Mi liberalismo es de pensamiento y acción, más allá de canciones y banderas; los ideales están encima de los líderes y los seudo líderes. No juzgaré a la institución y sus principios por los errores de algunos de sus miembros. El golpe de Estado no lo dimos todos los liberales, de hecho yo estuve en contra, lo dio una cúpula, unas cuantas personas que tienen nombre y apellido.
¿Fracasó la gestión de Armando Calidonio?
Si la valoramos comparativamente, no, porque ha hecho un poco más que sus antecesores más inmediatos, lo que no es gran mérito cuando aquellos hicieron casi nada; pero valorada en sí misma, sí fracasó porque él, inteligente como es, pudo haber hecho ya que San Pedro Sula fuera una ciudad de oportunidades para todos pero más bien procura el atraso y un ejemplo muy pequeño lo evidencia: cobra impuestos por ponerle un rótulo a un negocio.
Los liberales no dieron la cara en la votación a las reformas penales. Se escondieron. ¿Cuál es su reacción y no teme que esto le pase factura a usted?
Esa actitud fue cobarde y no vale que señalen a otras bancadas porque deben responder por sus propios actos. Muchos amigos liberales justifican que esa fue una jugada estratégica para no caer en el juego de nadie, y yo les contesto que debe ser una jugada tan genial pero tan genial como esos genios incomprendidos en su tiempo porque el pueblo liberal no entiende cómo eso benefició al pueblo y específicamente al partido.
Puede que me pase factura esa acción pero mantengo la esperanza de que el sampedrano tiene un criterio especial a la hora de escoger sus gobernantes locales y aunque nos hayamos equivocado algunas veces, tratamos de ver más a las personas que su filiación política.
Finalmente: ¿Cómo se ve en la noche del 12 de marzo, luego del cierre de las urnas?
Sereno; quiero ganar por todo lo que implica: abrir espacio para que las mentes más brillantes y las voluntades más decididas nos unamos con la municipalidad para empujar a la ciudad por la senda del auténtico desarrollo, ese que incluya a todo mundo; pero estoy preparado para lo que el pueblo sampedrano y especialmente el liberal decida este 12 de marzo. Estoy preparado para asimilar una derrota pero también para dirigir a la comunidad en armonía hacia el despegue definitivo de San Pedro Sula.
DEFINA A:
Mel: Político astuto.
Eduardo Martell: Merece ser el presidente de Honduras.
Partido Liberal: Un espectacular portaaviones mal dirigido.
Su musa es: Mi esposa, Fabiola.
Hijos: Los amores de mi vida, mi refugio.
Marathón: Mi escurridiza alegría de algunas semanas.
Diario Tiempo: Un gran amor.
Los Rosenthal: Mentes brillantes para los negocios.
Allan McDonald: Un excelente caricaturista.
Micheletti: El conservador líder de El Progreso.
Darío Banegas: Un excelente caricaturista.
JOH: El presidente que más ha irrespetado la constitución en la historia de Honduras.
Nasralla: Un gran ego y un gran corazón.
PREGUNTA: ¿Si pudiera invitar a cenar a tres personajes de cómics, quiénes serían?
“Constantine, para las interesantes historias sobrenaturales; Deadpool, para que cuente los chistes; y Batman, para que pague la cuenta”.
