Salvador: “La invitación de JOH al diálogo es para tomarse una foto conmigo”

Salvador Nasralla no acepta la invitación del presidente Juan Orlando Hernández.

De sus propias palabras a Eduardo Maldonado en el canal HCH, transcribimos de manera íntegra las conversación entre el ex presidenciable Nasralla y Piquito, sobre la carta que le envió JOH en la que lo invita a dialogar.

Aquí la conversación de manera íntegra:

Salvador: Te voy a contestar de manera informal porque no tengo la carta en mis manos. Pero de las palabras que te acabo de escuchar, habla que están dialogando distintos sectores de la sociedad hondureña, habla de mesas de trabajo y habla de los sectores que están dialogando.

Sin embargo, yo te pregunto a ti, Eduardo Maldonado; con tus tantos años de experiencia en periodismo. ¿Cuál es la razón por la cual la gente está en las calles reclamando?

Eduardo Maldonado: El resultado de la elección.

Salvador: ¡Ok! Entonces tener un montón de mesas de trabajo solamente distrae la atención sobre el problema o foco principal por el cual la gente está en las calles.

La gente está en las calles porque la mayor parte de los centros de votación de Honduras, el que ganó las elecciones fue Salvador Nasralla, no está en las calles por el problema que existe en salud, por el problema que existe en educación ni por el problema que existe con los cafetaleros, etc.

La invitación que él (Juan Orlando) está haciendo es una invitación para distraer y para sacarse el bulto y decir que él me invitó y que yo no quise ir.

Él tiene que mandar una carta en la que debe especificar que el dialogo tiene que ser para resolver lo que la gente está reclamando en las calles. Eso es el dialogo que se necesita. Un dialogo para resolver los problemas de país, eso no es lo urgente; esa no es la razón por la que la gente está en las calles.

Él está evadiendo el bulto con esa carta que tú has tenido la gentileza de leerme.

Eduardo Maldonado: Reitero. Porque la carta si dice, Ingeniero; hasta cuando yo llegué que ya está participando, la carta no tiene sentido. Pero cuando leí la última parte creo que usted tiene que meditar, ingeniero.

La carta dice: “Si usted – se refiere a Salvador Nasralla – lo considera pertinente estoy en la mejor disposición de reunirme previamente con usted”. O sea, ustedes dos. Usted y quizá su gente.

Para un dialogo abierto, sincero y sin condiciones. ¿Qué dice ingeniero?

Salvador: Ese es el problema. Él quiere hablar de lo que quiera, o sea; quiere perder el tiempo, tomar fotos de él conmigo y eso no lo vamos a permitir.

Para reunirme con él tendríamos que mandar un equipo de tres personas de mi lado con un equipo de tres personas de su lado y definir quién es el mediador internacional y cuáles son las capacidades de las cuales será investido el mediador internacional para decidir sobre el problema y que sea vinculante la participación del mediador.

Una simple reunión de él, conmigo; no tiene ningún sentido. Ya he tenido reuniones con él en el pasado, se lo que me va a decir, un hombre con una labia tremenda, un hombre con un gran poder de convencimiento, pero no es eso la solución para el pueblo.

Si él quiere tiene que mandar una carta en los términos del problema que tiene a la gente en las calles y el problema que tiene a la gente en las calles se llama: Fraude Electoral.

Si él quiere hablar de fraude electoral, hay que llamar a un mediador internacional que puede ser Rigoberta Menchú, Baltasar Garzón, el señor Mujica de Uruguay, pero así como que venga y hablemos y después nos vamos a sentar a las mesas de trabajo. Muchísimas gracias, pero no acepto pese a que todavía no he recibido la carta a la cual usted ha dado lectura.

Eduardo Maldonado: La carta no tiene más de lo que ya le leí, no tiene más. Le pregunto ingeniero, así; sinceramente. ¿Usted está en la disposición de dialogar con el Presidente Juan Orlando Hernández? ¿Realmente usted tiene esa disposición?

Salvador: ¡Claro que hay la disposición!… Pero no voy a ir hablar con él del problema de los cafetaleros, o los de salud. Eso no es lo que tiene a la gente en las calles.

Lo que tiene a la gente en las calles es que Juan Orlando Hernández y su pandilla del Tribunal Electoral se robaron las elecciones, ese es el tema. Para eso hay que definir las condiciones del dialogo, estos son los posibles mediadores, estos son los términos en el cual se debe tomar una decisión.

No me presto para ese tipo de trampas, estoy en la condición de dialogar en los términos que el pueblo hondureño me tiene autorizado.

El problema es el fraude electoral. ¿Qué vamos a hacer para resolver el fraude? ¿Se le ocurre a él, por ejemplo; renunciar? ¿Proponer nuevas elecciones? ¿O el mediador puede proponer nuevas elecciones para dentro de dos o tres meses? ¿Paramos la instalación del Congreso? Porque también fue electo fraudulentamente, especialmente con los 61 diputados del Partido Nacional.

En esos términos con un mediador internacional de sentarme con él esta misma tarde para dialogar. Mientras eso no esté definido, lo siento mucho.

Eduardo Maldonado: Usted me dice el esquema del dialogo para ver si no me equivoco. El tema único debe ser el fraude electoral.

Segundo. Que las opciones que usted presente sea que Juan Orlando Hernández, renuncie.

Salvador: No, no renuncie. Él puede renunciar. Yo no estoy pidiendo que él renuncie, tiene la opción. Una recomendación así como cuando una persona mira el panorama y un abogado le dijo a los que fueron a Estados Unidos, declárese culpable. Renunciar, pedir amnistía por los delitos que él cometió porque el fraude es un delito.

Pero si él sigue insistiendo que no fue fraude y todo eso, entonces traigamos un mediador y si el mediador determina hacer nuevas elecciones, voy a nuevas elecciones, pero no le estoy exigiendo renunciar a él.

Eduardo Maldonado: Entonces el esquema que usted presenta es tener nuevas elecciones.

Salvador: No. Eso es una alternativa.

Eduardo Maldonado: No, no, no… Permítame.

Salvador: Algunos juristas me dicen que legalmente esa es realmente la única alternativa si este hombre no renuncia. ¿Me explico? No es lo que yo sugiero.

Quien va sugerir debe ser el mediador. No Salvador Nasralla que es parte interesada.

Eduardo Maldonado: Está complicado todo esto ingeniero.

Salvador Nasralla: ¡Yo sé!  Debieron entenderlo ellos cuando les vencí el fraude en la mesa y después me meten un fraude tecnológico y la OEA se da cuenta del fraude tecnológico y circula mundialmente.

Acabo de hacer dos entrevistas que deberían estar pendientes, una me la hizo el Wall Street Journal y la otra me la hizo Univisión, es bien importante que estén pendientes porque todo el mundo no entiende como una persona que se robó las elecciones quiere permanecer a la fuerza en contra de los millones de personas que quiere que se vaya.

No conozco dónde quedó la carta. El mejor lugar para entregarme correspondencia a mí es en mi trabajo que es en la Corporación Televicentro, porque el Partido Anticorrupción me lo robó Juan Orlando con el Tribunal Electoral.

Eduardo Maldonado: De balde sirve que se la hayan llevado si usted ya dijo que no. Pues.

Salvador: ¿Cómo que ya dijo que no?

Eduardo Maldonado: Que no acepta la invitación.

Salvador Nasralla: Yo no he dicho que no. Quiero dialogo pero con condiciones, con mediador internacional y con el tema del fraude que tiene a la gente en las calles.

No quiero ir hablar de otras cosas para tomarse una foto y un video y decir que dialogo conmigo y que yo soy el intransigente. Nada que ver.

Eduardo Maldonado: ¿Cómo se iniciaría el dialogo? ¿Qué usted nombre tres personas y ellos tres para que acerquen las partes?

Tres de su lado y tres del lado de Juan Orlando, entre esos tres y tres ponerse de acuerdo en quien puede ser el mediador.

Salvador: Eso sería. Tengo que dejarte porque voy a entrar a una reunión. Te mando un gran abrazo y gracias por leerme la carta, hombre. ¡Buenas tardes!