¿Se puede aplicar la resistencia de NO VIOLENCIA de Luther King en crisis hondureña?

Martin Luther King, Gandhi, Mandela… He aquí tres ejemplos de hombres que derrotaron a la opresión, el racismo, la humillación y la explotación a través de la resistencia de la NO VIOLENCIA.

Mientras ellos pregonaban el perdón y ponían la otra mejilla, sus enemigos -los poderosos, los blancos, los imperialistas-, disparaban amenazas y balas.

Y muchos cayeron muertos.

El lunes, en medio de la celebración de los 89 años del nacimiento del doctor King, Heide Fulton, encargada de Negocios de la embajada de Estados Unidos en Honduras, Heide Fulton pidió a los hondureños a que sigamos el ejemplo del Premio Nobel de La Paz.

“A medida que Honduras se acerca a un diálogo nacional, el notable líder estadounidense Martin Luther King Jr. sirve como un modelo digno para el tipo de compromiso que se requiere para que verdaderos avances y la reconciliación se lleven a cabo”, expresó Fulton en su cuenta oficial de la red social Twitter.

Fulton adjuntó un vídeo en el que explica cómo el doctor King lideró sin violencia una lucha de derechos en Estados Unidos mediante protestas pacíficas.

“El doctor King empleó tácticas no violentas de protestas para luchar por la igualdad que aún hoy tiene eco a nivel mundial. El creía en el poder de la información, en la juventud. Inspiró cientos y miles de jóvenes para protestar pacíficamente por sus derechos. Fomentó el diálogo entre las comunidades”, recordó la diplomática.

¿Se podrá implementar este ejemplo cuando militares disparan a matar y un sector de protestantes de la Alianza Libre-PINu realizan actos vandálicos y atacan a la autoridad?

Fulton cree que sí.

“Siguiendo el ejemplo del doctor King, y con la voluntad de buscar y encontrar soluciones, los hondureños pueden crear una querida comunidad a través de un compromiso sostenido con la justicia, la igualdad de oportunidades y la hermandad. Honduras tiene una oportunidad grande en este momento”, sostiene Fulton.

Este es momento para una acción vigorosa y positiva. Honduras, ahora es el momento de construir la querida comunidad que el doctor King imaginó -dice la diplomática.

¿Es de mayor magnitud la denuncia de fraude y robo en las elecciones que hace la Alianza a los años de esclavitud y segregación que sufrieron los negros en Estados Unidos?

¿Si Nelson Mandela pudo perdonar y abrazarse con aquellos que lo mantuvieron 27 años en prisión… podrán Salvador Nasralla y Mel Zelaya sentarse a dialogar con el hombre al que acusan de haberles robado la presidencia de la República?

¿O son la confrontación y la violencia en las calles las únicas salidas que nos quedan a los hondureños?

En 2009, la clase política demostró hasta donde es capaz de llevarnos por su desmedid ambición de poder. Nueve años después… ¿Déjà vu?

¿Tanto vale la pena la presidencia de este país que los líderes políticos están dispuestos a que haya más asesinados?

¿Tanto vale la pena la presidencia de este país que los líderes políticos están otra vez dispuestos a llevarse de encuentro a los más pobres y marginados, que son, al final de cuentas, los que más sufren?

El odio y el rencor se han apoderados de los hondureños. Enemistarse por el tema político es, al igual que en 2009, lo más normal.

¿No pueden imitar nuestros políticos a esos tres grandes hombres? ¿O prefieren pasar a la historia como personajes destructivos y miserables?

Parece imposible implementar la NO VIOLENCIA en Honduras. En La India, Estados Unidos y Sudáfrica también llegaron a pensar lo mismo.