Un organismo podrido

Por casualidad ayer escuché una frase y no esta relacionada con el tema, pero le queda como anillo al dedo: “Una manzana podrida echa a perder el cesto”. 

Al parecer los máximos dirigentes del fútbol mundial están “podridos”, porque cada vez nos enteramos de toda la mafia que envuelve a la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA).

Este jueves la misma FIFA anunció que se quedan sin su secretario general, o sea que lo mandaron a volar, lo despidieron.

Jérôme Valcke fue cesado de sus funciones de la noche a la mañana, después de que se conocieran informes del famoso “periodismo de investigación” que involucraban al exsecretario con la venta al bajo bajo de entradas durante la Copa Mundial de Brasil 2014.

“Se han puesto en conocimiento de la FIFA ciertas alegaciones acerca del Secretario General y la FIFA ha solicitado a la Comisión de Ética de la FIFA que inicie una investigación formal”, explicaba el máximo organismo del fútbol en el comunicado donde confirmaban la suspensión de Valcke.

 

Biyuyo…
Al parecer a Valcke le gusta el billete, y a quién no, pero todo debe estar dentro de lo legar y él no cumplía con ese requisito mundial, por lo cual decidió adentrarse a un mundo corrupto en busca del dinero fácil.

Los reportes periodísticos denuncian que Valcke firmó un acuerdo para quedarse con el 50% de las ganancias de las ventas de entradas para los partidos del Mundial, las cuales según el informe eran sobrevaluadas en más de un 200%.

El exsecretario general de la FIFA, Jérôme Valcke, de 54 años de edad estaba en su puesto desde el 2007 y era considerado como la mano derecha del que todos ven como la “mente maestra” de los actos de corrupción, Joseph Blatter, quien no aguantó la presión y como ya sabemos presentó su renuncia a la presidencia del máximo organismo mundial del fútbol.

En mayo comenzó a salir a la luz todos los actos que han estado pudriendo poco a poco a los funcionarios de la FIFA, se detuvieron a siete altos dirigentes y días posteriores a ellos se involucró a Valcke en un muy cuestionado pago de 10 millones de dólares que hizo Sudáfrica a la Concacaf previo a la Copa Mundial del 2010.

En ese momento pudo defenderse:
“Han decidido que después de Blatter es mi cabeza la próxima que debe ser cortada. Bonito… pero poco responsable”, dijo Valcke.

Las denuncias son fuertes en contra del exsecretario general y solo algunos medios han tenido acceso a dicha información, el “O Estado de Sao Paulo” de Brasil, el “The Guardian” de origen británico y el “Süddeutsche Zeitung” de Alemania afirman que Valcke fue uno de los principales cabecillas que tramaron una venta ilegal de entradas¡ en el Mundial de Brasil 2014. Con este movimiento el francés ganó más de 2 millones de euros.

 

 

Amaño
Los boletos para ingresar y ver los primeros tres partidos de Alemania tenían un valor impreso de 190 dólares, pero al final fueron vendidos a 570 dólares.

Ese dato lo dice el empresario Benny Alon, dueño de la empresa JB Marketing, que desde 1990 es la encargada de la venta de entradas para partidos de la Copa Mundial.

Ahora solo queda esperar que se confirmen las acusaciones y que la justicia haga lo suyo con Valcke.

Nosotros seguiremos esperando, a ver cual es el siguiente dirigente que cae a la basura.