El defensor brasileño del Marathón, Caue Fernandes, está en el ojo del huracán por ser señalado como el responsable de lesionar a Eddie Hernández, esto en el partido en el que su equipo perdió 1-2 ante Motagua este sábado.
El delantero de las “Águilas” sufrió una fractura de su pómulo derecho en un encontronazo con el jugador “verdolaga”, el cual lo tiene en duda para jugar con la Selección Nacional el repechaje ante Australia.
Esta situación ha encendido las alarmas en el camino rumbo al Mundial de Rusia 2018, y ante ello Fernandes ha recibido varios cuestionamientos, ya que no es la primera vez que deja a alguien fuera de actividad.
https://twitter.com/carlocostly31/status/921924515604647936
Hace algunas semanas el mismo Caue Fernandes lesionó accidentalmente a Carlo Costly (Fractura en una costilla), provocando que se perdiera varios partidos con Olimpia y el cierre de la Hexagonal Final rumbo al Mundial de Rusia 2018.
El “Cocherito” no se anduvo por las ramas y llamó “puerco” al brasileño, al igual que lo hizo este sábado cuando se enteró de la lesión de Eddie Hernández.
Pareciera que los australianos mandaron a Fernandes para que acabara con nuestra delantera, pero… ¡No nos metamos a rollo!
Ambas lesiones (La de Costly y Hernández) han sido totalmente circunstanciales, mismas que se dieron por encontronazos normales que pueden aparecer en cualquier partido de fútbol.
Se lesionó Eddie Hernández buscando el gol del Bicampeón Motagua. pic.twitter.com/1OY1h6g3Rx
— LOKO X MOTAGUA (@LOKOXMOTAGUA) 21 de octubre de 2017
El mismo Eddie Hernández ha hablado sobre la jugada y deja claro que no vio mala intención en el defensor del Marathón.
“No creo que haya habido mala intención, fue una jugada circunstancial. No he visto la toma pero como yo salté antes y cuando venía para abajo él saltó después y allí fue el impacto pero no creo que haya sido culpa de Caue”, mencionó a diferentes medios de comunicación.
No sé qué piensan ustedes, pero creo que se está siendo muy injusto con Caue Fernandes.
En fin, no queda más que darle una palmada en la espalda y pedirle que ignore las palabras en su contra, que esté tranquilo y que se concentre en su trabajo con Marathón.
