Cuán importante es la vida animal en el planeta, la conservación de especies en peligro de extinción, es y debería ser nuestra mayor preocupación y prioridad, somos conocedores que la cadena alimenticia en el mundo está fallando por la contaminación y destrucción del ambiente.
Pero personas como las que encontramos hoy nos demuestran que siguen habiendo seres humanos que se preocupan y defienden la fauna de nuestro paisaje llamado Honduras, y sabemos que hay más alrededor del mundo.
Este mes nos llenó de sorpresas positivas y una de ellas es el evento al que fuimos invitados; la liberación de iguanas en el país, acto que permite el crecimiento y desarrollo de estos animales que están a punto de dejar de existir si no se les da una mano. Es nuestro deber como seres pensantes y autónomos luchar por estas especies y lograr afirmarlas en el ecosistema actual.
Desde 1966 se inició un proyecto que pretendía mejorar la fauna y flora, su objetivo desde un principio fue la crianza y reproducción de iguanas que están en peligro de extinción. Es agradable ver como la misma concientización ha logrado salvar la vida de esta iguana verde y algunos otros animales que también se encuentran en cuidado permanente en la zona. En el proyecto también están involucradas las comunidades con donación de tierras que se han unido para luchar por una causa común.
El pasado 12 de diciembre, se logró una vez más la realización del evento de concientización en Zacate Grande en el sur del país y estamos orgullosos de decir que fuimos partícipes del evento que permitió la liberación de más de 500 iguanas en cautiverio en Amapala ese mismo día y 500 más el día siguiente.
Cada año como de costumbre, Dinant, se dedica a darle libertad a más de mil iguanas que toda la vida han sido criadas en instalaciones del Conservatorio de Vida Silvestre en Amapala. Con el claro propósito de lograr su preservación y multiplicación. Una vez terminado el proceso que implica el cuidado de estos animales se abre paso a la liberación de ellos mismos, para que puedan ser parte de un hábitat adecuado para vivir.
La familia Facusse que impulsan estos grandes proyectos se honran en ser parte de un cambio significativo para el país en el ámbito ambiental como ser la conservación de la vida silvestre que permitió cuidar y alimentar a las iguanas durante un año y finalmente ser reinsertadas al ecosistema.
En total han sido liberadas 18 mil iguanas durante 22 años de fundación del proyecto que fue creada por el empresario Miguel Facusse. Zacate Grande tiene una extensión de aproximadamente 2,085 hectáreas en las que se realizan diferentes actividades de prolongación de vida animal y crecimiento vegetal.
Se disfrutó de la colaboración de Olvin Andino, Gerente de Proyectos Especiales en Dinant que comentó:
“Con esta actividad Dinant contribuye de manera significativa a proteger nuestra fauna nacional y medioambiente”
También nos comentó que el hombre con el pasar de los días se va educando y que con este tipo de iniciativas le permite tener formación con el tema ambiental, según palabras del biólogo nos cuenta que especialistas de todo el mundo hacen acto de presencia para conocer a profundidad el proyecto que es impulsado en la zona del Golfo de Fonseca.
Las iguanas que viven en los árboles y se alimentan de hojas han tenido un largo proceso para ser salvadas de la extinción y uno de los encargados de velar por ellas ha sido el biólogo Andino.
“Las iguanas son fundamentales para el ecosistema debido a que se alimentan de hojas, flores y frutas. En las frutas van pequeñas semillas, son ingeridas y pasan por el tracto digestivo, la iguana excreta y las semillas caen al suelo, en invierno; germinan y nacen miles de plantas, lo que permite que el bosque se expanda”
Recibimos también palabras del alcalde de la zona, Alberto Cruz quien emocionado nos contó que con mucho esfuerzo y dedicación fueron capaces de lograr este proyecto que permite la preservación de vida animal.
El evento que tuvo la presencia de medios de comunicación, estudiantes de la comunidad, padres de familia y cuerpos policiales, fue un rotundo éxito.
Una zona fresca nos recibió, la cantidad de árboles que vimos nos llenó de satisfacción al saber que en Honduras hay personas que se dedican al cuidado de la fauna y flora que nace en estas tierras. El evento nos mostró que tenemos personas realmente interesadas en salvar nuestro ecosistema y darle un respiro fresco a Honduras.
