Junto a Chespirito, Cantinflas es el cómico consentido de los hondureños. ¿Quién no ha disfrutado con sus películas?
Pero la vida del hombre que nos hizo reír está marcada por la tragedia familiar.
La más reciente la ha vivido Marisa Moreno Bernat, su nieta, quien se recupera ahora de la bestial agresión de Alain Meder, su marido.
Todo ocurrió el pasado 19 de septiembre, aunque la noticia estalló hasta hace un par de horas.
La nieta se recuperaba de un severo trauma facial, esguince cervical y varias fracturas en su rostro.
“Ojalá todas las mujeres denuncien los abusos y no sufran lo que yo estoy pasando”.
Ese fue el mensaje que Marisa envió ayer a los medios a través de su padre Mario Moreno Ivanova, único hijo del actor mexicano.
Según confirmaron varias fuentes ligadas a la familia, la joven fue encontrada en el pent house en el que vive.
Estaba boca abajo en un charco de sangre tras romper la puerta de la habitación en la que el agresor la había encerrado.
De allí fue trasladada al Hospital Ángeles de Interlomas, donde detectaron señales de ahorcamiento y una cantidad de fracturas que se estiman en 200, aunque no constan en el parte médico.
“Lo primero que piensas es ‘quiero descuartizarlo, quiero hacerlo picadillo’”, dijo el padre de la víctima.
Alain Meder, casado desde hace dos años con Marisa, fue detenido dos días después de la agresión, y enfrenta cargos por violencia de género, lesiones graves, tentativa de homicidio y también por cohecho, ya que habría intentado sobornar a la policía.