Todos la amamos… menos sus rivales. Ronda Rousey es la versión bella de Mike Tyson, pues sus peleas por lo general apenas duran unos segundos.
(Ha ganado once de sus doce combates en el primer round, nueve de ellos con llaves inmovilizadoras).
Por eso no es de extrañar que la campeona de UFC de peso gallo lo sea también en las redes sociales.
Videos, memes, cartas, reportajes, foros, selfies… Ronda está en todas partes.
Con 28 años, tiene el mundo a sus pies.
Sports Illustrated la puso en el número 1 de la lista de sus cincuenta Most Dominant Athletes Alive (los atletas más dominantes del mundo). Maxim le dio su portada.

Pero lo que la ha convertido en un ídolo en internet no ha sido solo el deporte. Ronda tiene una concepción propia del activismo femenino.
Su último reto –ganó por knockout, como siempre-, fue poner a la venta una línea de camisetas donde se puede leer uno de sus eslóganes más extendidos: ‘Don’t be a D.N.B.’, iniciales de ‘Don’t be a Do Nothing Bitch’ (No seas una perra que no hace nada), y que empuja a las mujeres a no permanecer en una posición pasiva y dejar que otros tomen las riendas de su vida.
La propia Ronda anunció en su Instagram que parte de los beneficios irían a parar a la asociación Didi Hirsch, que ayuda a mujeres con problemas de salud física, mental y de aceptación de imagen.
Gracias a su tirón en redes (5,3 millones de seguidores en Instagram, 1,78 millones en Twitter y 8,4 millones en Facebook) logró vender cerca de 60 mil unidades.
Ronda también es letal con sus comentarios.
“Solo porque mi cuerpo fuera desarrollado con un propósito ajeno a cogerse millonarios no quiere decir que sea masculino.”
Declaraciones como esa le han buscado más de una enemistad entre críticos que creen que, aunque use el término “bitch” con objetivos de empoderamiento, los matices son negativos y hacen un flaco favor a las mujeres.
A pesar de estas críticas, Ronda ha encontrado una legión de fans en el siempre contradictorio y agresivo universo de internet entre los que se encuentra, entre otros, Beyoncé, que en sus conciertos proyecta este discurso de la campeona antes de entonar su Diva.
Lo cierto es que Ronda no se calla una.
Hace no mucho también afirmaba sin ningún rubor estar obsesionada con Pokémon.
Y allí explicó cómo solía moderar un foro de Pokémon, nombró a Mew como su favorito, mencionó a un personaje (Throh, de la quinta generación de Pokémon) que solo es conocido por los auténticos adictos a la franquicia, se declaró fan de World of Warcraft y metió en la misma frase Juego de Tronos, Pokémon y Bola de Dragón, sumiendo a Reddit en un frenesí.
Además, ya inició su carrera como actriz. Ha aparecido en Fast & Furious 7 y, sobre todo, en Los Mercenarios 3, donde tenía fascinado al equipo: se empeñó en hacer ella misma todas sus secuencias de riesgo y el jefe de especialistas de la película declaró que haría una película de acción con ella de inmediato.
“No le tiene miedo a nada”, dice.
Ja, vaya novedad…