Manny Pacquiao ya no necesita una pelea más para ponerle punto y final a una de las carreras más gloriosas en la historia del boxeo.
¿Para qué arriesgarse?
Porque hay que aceptar una cosa: el Pacman no volvió a ser el mismo desde que fue brutalmente noquedado hace tres años por Juan Manuel Márquez.
Con 36 años encima y la mente en otro asunto (su carrera política), el ídolo filipino está lejos de ser el boxeador que nos deslumbró con su explosividad para noquear-vapulear rivales.
Desde que le ganó a Miguel Ángel Cotto por knock out técnico hace seis años, Pacquiao peleó diez veces con pobres resultados:
Perdió tres (la de Márquez, una con Timotey Bradley y la de Mayweater, en la que fue ridiculizado de principio a fin), y las siete que ganó fueron por decisiones.
Algo le pasó a Manny luego de vencer a Cotto.
Sin Mayweather en escena, ya no hay razón para que Manny vuelva a subirse a un cuadrilátero. La única pelea válida era una revancha con el que hasta hace unos meses era el mejor boxeador libra por libra.
Pero Bob Arum, el promotor del único hombre que ha ganado cinturones en ocho categorías diferentes, anuncia que habrá una última pelea: la fecha: 9 de abril del próximo año.
Según Arum, Manny le dijo durante una cena en Nueva York que “Con suerte, para mediados de mayo habré sido electo senador de Filipinas y en ese momento yo no puedo boxear porque necesito enfocarme en el Senado donde tengo que asistir. La del 9 abril es mi última pelea”.
El Pacman es congresista por la provincia de Sarangani, pero competirá por uno de los 24 escaños del Senado.
Doce de los lugares del Senado –que duran periodos de seis años- serán elegidos a mediados de mayo, por lo que Manny insiste que su última pelea será a más tardar a mediados de abril, por lo que puede pasar al menos un mes en campaña electoral.
Manny, con récord de (57-6-2, 38 KOs), ha ganado unos 180 millones de dólares en su carrera.
De los nombres mencionados, ninguno despierta mucho interés, aunque parece ser que el campeón peso welter junior Terence Crawford podría ser el escogido.
