Francia no se quedó de brazos cruzados y su aviación empezó el bombardeo sobre Raqqa, ciudad siria que es bastión de los terroristas del Estado Islámico.
El propio ministro de Defensa de Francia, Bernard Cazaneuve, confirmó la información.
Según Cazaneuve, en la operación intervino una docena de aviones (diez de ellos cazas), y arrojaron no menos de una veintena de bombas sobre dos objetivos.
Los aviones despegaron de Jordania y los Emiratos Árabes Unidos, y están en coordinación con las fuerzas estadounidenses.
“El primer objetivo destruido era utilizado por Daesh (el acrónimo árabe del Estado Islámico) como centro de mando y de reclutamiento yihadista y depósito de armas y munición. El segundo albergaba un campo de entrenamiento”, explicó el ministro, francés.
Francia argumentó que los bombardeos son “Una legítima defensa” contra el grupo terroristas luego que militantes suicidas del Estado Islámico realizaran una serie de atentados en París y que dejaron, hasta el momento 129 muertos y más de 300 heridos.