Ronda Rousey sigue picada. Y no es para menos. Su vida no ha sido la misma desde que fue noqueada en noviembre por Holly Holm.
Esa noche, Ronda no solo perdió el cinturón de peso galla de UFC, sino también los dientes le quedaron flojos y el orgullo por los suelos.
¿Es la misma? Al menos en lo bocona parece que sí.
“Quiero esa revancha, necesito ganarle a esa chica -dice Rousey refiriéndose a Holm-. No tenemos fecha exacta, pero será a finales de este año”.
Después de la macaneada, Rousey, de 28 años, ha aparecido poco en los medios de comunicación. En su primera entrevista le dijo a ESPN que quería la revancha de inmediato, pero eso no será posible.
En lugar de eso, Holm defenderá su título ante Meisha Tate el 5 de marzo en Las Vegas. Si Holm gana, entonces le dará la revancha a Ronda.
“La revancha con Holm es todo lo que quiero”, reiteró Ronda.
“Esa pelea será en algún momento hacia el final del año… No me han dicho una fecha exacta o un lugar. Es una decisión que tomaremos todos juntos. Estoy esperando qué opciones van a darme”.
