Uno de los títulos más ansiados en la historia de la Liga Nacional fue conquistado en la noche del jueves 5 de marzo de 1992 cuando Motagua se impuso por 1-0 ante Real España gracias a un gol de Álex Geovanny Ávila, el cual puso fin a trece años, un mes y seis días de sufrimiento de parte de los aficionados al conjunto azul, el cual no celebraba un campeonato desde que había vencido por 1-4 al mismo Real España en la tarde del domingo 28 de enero de 1979.
En aquella lejana tarde, los héroes motagüenses habían sido Luis Alberto “Chito” Reyes y Ramón “Primitivo” Maradiaga, quienes se repartieron los tantos de su equipo, el cual se coronó campeón tras obtener un marcador global de 5-1 pero desde ese glorioso día, la escuadra de las águilas se había limitado a ver como Olimpia, Real España, Vida y Marathón se repartían los honores en la primera división catracha.
En la temporada 1990/91 el Motagua ya había arañado la gloria tras alcanzar la final gracias al recordado gol de Patrocinio Sierra, el cual dejó fuera de competencia a Olimpia pero el sueño se diluyó al caer 2-1 ante Real España con dos goles de Rodolfo Richardson Smith, los cuales le permitieron a los aurinegros el remontar una desventaja inicial tras una anotación de Óscar Murillo.
Llegada la temporada 1991/92, Ángel Ramón Rodríguez fue nombrado como técnico motagüense en reemplazo de Carlos Jurado Román y llevó a su equipo a asegurar su segunda final consecutiva al obtener el liderato de las vueltas regulares al superar por dos puntos a Real España tras sumar 16 victorias, cinco empates y seis derrotas, 38 goles a favor y 19 en contra. Durante dicha etapa del torneo, los azules obtuvieron su triunfo más amplio en la historia en la Liga Nacional al vencer por 7-0 a Súper Estrella el 24 de noviembre de 1991.
Una vez en la pentagonal, Motagua igualó ante Marathón y fue derrotado por Real España, resultados que lo pusieron cuesta arriba en la intención de obtener el título de Campeonísimo y ante esa situación, “Mon” Rodríguez comenzó a utilizar un equipo alternativo y reservó al plantel titular para los duelos de la final, lo cual le generó muchas críticas ya que al momento de afrontar el duelo decisivo ante la escuadra catedrática, los azules arrastraban una racha de diez juegos sin triunfos, seguidilla durante la cual registró dos empates y ocho derrotas.
Una vez en la instancia decisiva, azules y aurinegros igualaron 0-0 en el juego de ida, disputado el sábado 29 de febrero en el estadio Francisco Morazán y en el día del encuentro de vuelta, con el arbitraje de Gonzalo Tejada, Motagua formó con Marvin Henríquez, Patrocinio Sierra, Javier Padilla, Mateo Ávila, Hernaín Arzú (Edgar Sierra), Donaldo Reyes, Óscar Murillo, Fabricio Pérez, Miguel Seminario (Edwin Geovanny Castro), César Obando y Álex Geovanny Ávila, en tanto que Real España formó con Wilmer Cruz, Marco Anariba, Juan Castro, Karl Roland, Emilson Soto, Mauricio Fúnez, Marco Vinicio Ortega, Washington Hernández (Camilo Bonilla), Ciro Paulino Castillo, Luis Orlando Vallejo y Nahamán González (Erick Gallegos).
Al final de los 90 minutos, los azules se impusieron con el tanto de Álex Geovanny Ávila a los 63 minutos de juego tras un pase de César Obando, luego de una acción iniciada por Fabricio Pérez. A propósito de dicho gol, Wilmer Cruz, el arquero de Real España, señaló que le habían marcado de cualquier forma pero que era la primera vez que le anotaban de nalga.
Al final de los 90 minutos, la afición motagüense estalló de júbilo ya que dejaban atrás un total de 4785 días sin poder celebrar un título.
Para el recuerdo queda el hecho de que el “Superman” Cruz ya había adquirido fama de atajador de penales pero no había podido ante las ejecuciones de César Obando y esa noche, el “Nene” falló un disparo desde el punto fatídico, el cual se estrelló contra el poste y el hoy técnico de Juticalpa señaló que rozó el balón y fue él quien lo desvió hacia el vertical pero las repeticiones de la acción ponían en duda lo afirmado por el guardameta de la realeza.
A lo largo del torneo, Motagua acumuló 17 triunfos, ocho empates y doce derrotas, 42 goles a favor y 33 en contra en sus 37 juegos y sus goleadores fueron César Obando (11), Álex Geovanny Ávila (10), Edwin Geovanny Castro (7), Miguel Seminario (6), Fabricio Pérez (5), Donaldo Reyes, German Rodríguez y Ramón Romero (1).
