Para los salvadoreños, el viernes de Semana Santa no fue de crucifixión, sino de resurrección. Dos veces estuvieron los de Primitivo muertos, pero goles de suspiro (al final del primer tiempo y al minuto 90), les dieron un puntito que no es ni gloria ni tragedia.
Es lo que es: un puntito.
Los medios salvadoreños analizaron lo sucedido.
LA CRÓNICA DEL DIARIO DE HOY DICE:
“Honduras, sin ser arrollador, pero sí muy atento para sacar provecho a los errores del portero salvadoreño Derby Carrillo, estaba dando un paso en positivo con un marcador 2-1 sobre El Salvador en el estadio Cuscatlán y de paso dejaba al borde del abismo a la azul, casi eliminada en las Eliminatorias Rusia 2018.
Entonces fue cuando una gran combinación, en un gran pase de Barahona a Bonilla, permitió que el delantero que juega en Azerbayán se luciera con un golazo de cabeza, de los que pocas veces se celebran en este fútbol.
En el primer tiempo, solo faltaron 18 minutos para que la Selecta encajara el primer gol, el hondureño Albert Elis anotó tras un corner, en el que el portero salvadoreño Derby Carrillo salió a “cazar mariposas”, a nada.
El juego tomó un ritmo a favor de los hondureños, pero a los 45, Pablo Punyed concretó la mejor jugada para la azul.
Punyed recibió asistencia de Barahona, aguantó la marca de los dos centrales catrachos y de media vuelta sacó un toque fino pero potente que le quemó las manos al portero Escober, era el 1-1 con el que se fueron al descanso.
En el complemento, el juego se notaba mejor tácticamente y El Salvador empezó a tocar de mejor manera, pero fue efímero. A los 59 minutos, Anthony Lozano marcó el segundo gol para los hondureños, de nuevo tras la complicidad del meta Carrillo, que frenó un pelotazo, pero soltó el balón y se la sirvió al atacante catracho.
A los 90 minutos, la Selecta logró el empate por medio de Nelson Bonilla que conectó de cabeza uno de los mejores goles de la noche, tras recibir un gran pase de Barahona. El martes se sabrá el futuro de la azul en su calvario de la eliminatoria”.
