¡Nambe! Al “Capi Izaguirre” no se le hace eso…

Cómo dicen por ahí: “No contés los pollitos antes de que nazcan”, eso pasó este domingo con Júnior Izaguirre, quien jugaría su partido 500 en Liga Nacional pero ¡Neles! Diego Vásquez lo dejó en el banquillo todo el encuentro y el récord no se concretó, esto a pesar del reconocimiento que recibió el jugador antes de iniciar el juego ante el Marathón.

En la previa los aficionados azules se rindieron ante el capitán Izaguirre, reconociendo su carrera y agradeciendo todo lo que le ha dado a la institución, un saludo caluroso que llegó a los directivos del club, quienes no dudaron en hacerle algo especial al ya histórico futbolista.

La dirigentes del “Azul Profundo” le regalaron a Izaguirre una camiseta del equipo con el número 500 en su espalda, además de nombrar al jugador como Miembro Pasión Azul vitalicio de la institución, así que de ahora en adelante no tendrá problema alguno para entrar de “grolis” a los partidos del Motagua cuando juegue como local, claro, esto cuando se retire.

En fin, lo curioso de todo esto es que le entregaron estos regalos a pesar de saber que no comenzaría el partido como titular, algo que llamó la atención del público en general, pero que nos hacía pensar que tarde o temprano ingresaría de cambio.

Los minutos pasaron y pasaron, Motagua derrotó 2-1 al Marathón e Izaguirre se quedó en el banquillo durante los 90 minutos, así que al final no pudo disputar sus 500 partidos en la Liga. Oficialmente se quedó con 499.

¡Un desastre!
Eso no puede suceder en una institución profesional, pero bueno, son cuestiones que pueden suceder.

El responsable de que Izaguirre no haya jugado es Diego Vásquez, pero él tiene sus motivos:

“Este partido no, porque nosotros apostamos al equipo, teníamos que ganar, y los de atrás estaban bien (…) Él sabe que es más importante el equipo que los logros personales, me pone contento por él, lo felicitamos y estamos contentos, pero Motagua está por encima de las personas”, afirmó el estratega argentino.

“La Barbie” tiene toda la razón, así que no hay nada que reprocharle, simplemente fue falta de comunicación y listo. Vásquez tuvo que ser sincero y decirle a los dirigentes que no sabía si el defensor iba a jugar, que eso lo dicta el mismo desarrollo del partido, y si fue así los ‘mandamás’ de la institución tenían que imaginarse el escenario, así no le hubieran dado un reconocimiento por cumplir sus 500 partidos sin cumplirlos.

En fin, suele pasar…