La selección brasileña ve comprometida su participación en los Juegos Olímpicos de Río 2016. Un segundo empate, ésta vez con Iraq, los obliga a conseguir una victoria ante Dinamarca que se posiciona en el primer puesto del grupo integrado también por el conjunto sudafricano.
La afición se mostró muy crítica con Neymar, al ser la figura y capitán, además de todos los integrantes del cuerpo técnico. “Pedimos disculpas a los aficionados”, salió a comunicar el entrenador de la selección olímpica, Rogério Mical.
El estadio Mané Garrincha presenció una nueva decepción de su combinado patrio que no pareció despertar tras el debut con empate. “No conseguimos hacer nuestro fútbol, hoy tuvimos mucho apoyo y sólo al final tuvimos abucheos. Pedimos disculpas a los aficionados, al pueblo de Brasilia que llenó el estadio para acompañar al equipo, pero no conseguimos darle una respuesta”, explicó el entrenador de 47 años.
El seleccionado brasilero mostró una mayor vocación ofensiva y logró crear hasta siete oportunidades claras de gol pero la puntería no estuvo fina. El miércoles se enfrentarán a Dinamarca y para avanzar a la siguiente fase sin depender de otros resultados, deben ganar.
A pesar de que pidieron disculpas al público, por su participación, ellos se sienten muy ofendidos y decepcionados tanto así que están pidiendo a Marta capitana de la selección femenina que tome las riendas.