¿Por qué dejé de comer el pan de la Bambino?

Yo no sé vos, pero cuando yo estaba pequeño, uno de mis mayores placeres era comer pan de la Bambino con mantequilla y Coca-Cola.

¡Delicioso!

En ese entonces, la Bambino era la mamá del pan en Tegucigalpa.

Recuerdo su anuncio en radio de “Al pan pan, y al vino vino, y tratándose de pan, nada mejor que Bambino”. Y así fueron pasando los años.

Pero hay que dejarnos de sentimentalismos y nacionalismos falsos, y reconocer que con el tiempo, la Bambino bajó la calidad y de aquel delicioso pan quedó un producto con una consistencia diferente.

¿Qué era? No te sabría decir, pues no soy panadero, pero el pan de la Bambino ya no era el mismo. Sin embargo, uno lo seguía comprando porque era prácticamente el único que existía en el mercado.

Como todas las cosas de la vida, eso cambió, y la Bambino se quedó rezagada en el tiempo y fue avasallada por nuevos productos, más frescos y con más variedad.

A eso sumale una agresiva campaña de mercadeo que se “comió” a aquel lema que ahora estaba desfasado de “Al pan pan, y al vino vino, y tratándose de pan, nada mejor que Bambino”.

Al final, puede ser que esos nuevos productos sean un poco más caro, pero si son más sabrosos, lo terminan comprando.

Lo que le ha ocurrido a la Bambino da pesar, porque es una marca con la que crecimos y llegamos a querer, y por los trabajadores que se quedarán sin empleos.

El argumento de los altos precios de producción y el salario mínimo son, a nuestro entender, justificaciones. ¿Por qué no ha cerrado BIGOS a pesar de la feroz competencia de franquicias con millones de lempiras presupuestados para mercadear sus marcas y que, de remate, no pagan impuestos?

Sabemos que no es fácil para los dueños de BIGOS. Pero siguen siendo la favorita de un buen segmento del público, y constantemente crea nuevos productos y promociones, porque sabe que si ni lo chupa la bruja.

Como le ocurrió tristemente a la Bambino…

¿Y yo? Bueno, sigo con la costumbre de echarme de vez en cuando un pan con mantequilla… La mantequilla (valga la publicada gratuita), continúa siendo Leyde. Pero el pan dejó de ser de la Bambino desde hace algunos años…