Julissa Carolina Núñez es docente de la Escuela Nacional de Arte y Dramática y directora del teatro Las Manos. Es una mujer luchadora y extrovertida que nos cuenta sobre cómo es ser madre y sobresalir en la actuación. Los invito a leer esta entrevista.
¿Cómo empezó la pasión por el teatro?
Empezó de la manera más chistosa porque fue por una equivocación metí la clase de teatro en Honduras en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras pensando que sólo era teórica.
En ese momento me encontré con una maestra muy dinámica y con una energía increíble Nilsa Cruz, diferente a los demás catedráticos que uno está acostumbrado a ver, porque tiraba sátiras al sistema de la política.
¿Te quedaste ahí?
En ese tiempo una compañera Cindy Motiño me invitó a mi y a un compañero a que viniéramos a estudiar en la Escuela de Teatro, me entrevistaron y súper amable, el primer día de clases nos dijo “siéntese aquí, les tenemos los mejores asientos”. No había ni una silla, nos sentamos en el suelo, y desde ahí fue como salir de nuestro mundo a un mundo diferente un mundo de libertad y entrega, desde ahí me enamoré.
¿Qué estudiabas en la UNAH?
Licenciatura en Mercadotecnia.
¿La terminaste?
No, porque me dediqué al teatro, me enamoré y lo elegí como profesión, aunque no la he terminado irónicamente.
¿Mezclás el teatro con la mercadotecnia?
Sí, nosotros no somos una institución que recibe el apoyo del gobierno, pero no por eso nos vamos a detener, así que siempre hacemos peñas artísticas y todo este tipo de cosas, ayudando aquí y ayudando allá.
Saliste embarazada cuando estabas en el teatro. ¿Cómo fue esto?
Fíjate que esto es muy chistoso; una de las cosas por las que me metí al teatro fue porque el papá de mi hijo en ese entonces le encantaba y él también se metió al teatro. En la escuela no dijimos que éramos novios, sino que éramos amigos, todos creían que éramos solo eso, yo caminaba por mi lado y el por el suyo, la sorpresa es cuando yo salgo embarazada en el 2012 la pregunta era “¿De quién estas embarazada?” y ahí tuvimos que decir que éramos novios.
¿Nadie sabía que eran novios?
Nadie.
¿Y embarazada seguiste en el teatro?
Eso no me detuvo en lo absoluto.
¿Aja y que paso, cuando nació el bebé?
El papá de mi hijo se salió del teatro, estuvo haciendo mimo durante un tiempo, yo me reintegré cuando mi bebé tenía tres meses y la señora del aseo me ayudaba mientras yo estaba en mis clases, ella trapeaba, y subía al niño en una canastita, lo andaba jalando para que se durmiera o yo traía una silla de niño se ponía la maestra a balancearlo para que quedara dormido.
¿Vos vivís del teatro?
Sí, yo solo de eso vivo.
¿De alumna pasaste a ser una prestigiosa maestra de teatro?
José Luis Recinos, que es mi amigo, me pidió que le ayudara a dar clases y yo pues encantada, de ser parte de esto.
¿Qué le dice a las madres que quieren participar en teatro?
No se detengan sigan adelante, es verdad que tiene a su hijo, pero ustedes son el ejemplo de ellos, necesitan inspirar a ellos y inspirarse ustedes, en el camino se van arreglando las cosas hay que escuchar pero hay que seguir el instinto del corazón.
Fotos: EL OSO MONTERO.