María José Padgett es una joven hondureña que a sus 23 años ya tiene claro el rumbo que quiere seguir para alcanzar el éxito en su vida. A su corta edad es una emprendedora que pone todo su empeño y esfuerzo en sus joyas.
Únicas de su clase, hechas con materiales tradicionales en la India, aquel lejano país con miles de años de cultura y cosas excéntricas.
María José logró captar la esencia, atraparla y hacer unas joyas maravillosas. Platicamos con ella y nos contó todo acerca de cómo nace esta idea.
¿Cómo surge esta idea?
En 2014 conocí en Dallas a una persona de India. Anduve con él y sus padres querían conocerme, me invitaron a India.
Al final todo salió bien, me quedé un mes y me encantó. Estuve expuesta a la cultura, la mamá de él era una súper modelo y me enseñó la moda. Íbamos a modelajes, conocí artistas de Bollywood.
Vi las joyas y en ese momento supe que era algo que tenía que hacer porque no había visto jamás, ni aquí, ni en los Estados Unidos.
¿Por qué no Honduras y decidirte por India en cuanto a los diseños de joyas?
De India es la cultura en general, es algo tan diferente con lo que yo crecí. Siempre quería irme a los lugares más lejanos, conocer, empaparme de culturas.
Me da risa porque mis amigos decían que me iba a ir para África, adoptar un niño y abrir un restaurante “Hippie”.
Siempre me han encantado las cosas raras, diferentes.
¿Quién hace los diseños?
Yo hago algunos y los demás son diseños tradicionales de la India. Trabajo con artesanos allá.
¿Cómo se llama la joyería?
Zindagi.
¿Qué significa?
Significa vida.
Escogí ese nombre porque hay una película que te dice que la vida no se repite, solo vivís una vez y esa es mi mentalidad. Como que no hay segundas oportunidades.
¿Cómo te mercadeas y vendes tu producto?
Siempre las ando de arriba – abajo. Pero en Instagram (Shop Zindagi) es una manera muy amplia de mostrar las joyas.
No hago pago para nada, porque quiero que la gente cuente de mis productos, no quiero imponer a nadie. Si no que lleguen por recomendación.
¿Qué materiales usas?
Hay plata, también hay de “brass” que no sé cómo se diría en español porque es una combinación de metales hipo alergénicos, no dan alergia.
Es diferente a la fantasía. Y luego hay de plata con baño de oro de 22 quilates.
También hay muchos cristales, piedritas como circonios.
¿Qué precio tienen?
Andan en un rango de 35 dólares (830 Lempiras) hasta 450 dólares (10 mil 700 Lempiras).
¿A qué aspiras? ¿Hasta dónde queres llegar?
Estoy segura que Zindagi llegará a ser una marca a nivel mundial porque tengo la compañía establecida en Estados Unidos.
Próximamente haré un evento en Europa. Quiero que sea conocida, más no comercial. Quiero que la gente que use las joyas esté interesados en la cultura, que ame lo que anda puesto.
¿Cada cuánto vas a India?
Dos o tres veces al año y me quedo más o menos un mes. A veces dos meses. Lo más que he estado son tres meses y medio.
Hay algo que me gustaría aclarar, ellos son indios; pero se les dice hindús a los que practican las religión Hinduismo.
¿Los diseños son únicos?
Sí. Son piezas únicas. Nadie andará algo que vos compraste. La mayoría de cosas son materiales y piedras escogidas por mí. Los diseños también.
Por eso voy seguido a India. Porque me tomo el tiempo de revisar cada pieza, cambiar las piedras si no me gustan.
Sólo traigo una pieza de cada diseño, aquí en Honduras todo mundo se conoce, por eso los diseños son exclusivos.
Me fijé que por un lado son una cosa y por detrás de la joya es otra cosa. ¿Qué significa?
Hay varias maneras de poner las piedras, un estilo se llama “kundan”. Al otro lado está pintado a mano y se puede usar de ambos lados; esto que es artesanal y pintado a mano se llama “meenakari”. Es completamente tradicional de la India.
¿Pensas dedicarte toda tu vida a esto?
Siento que sí. Porque puede crecer. Disfruto y amo lo que hago. Esto me ha empujado a conocer la cultura, aprender un idioma nuevo.
¡Gracias María José!
Sesión Fotográfica: Frank Alexander Aguilera.
