Una acción digna de admirar es la de un inspector del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre que en un operativo un conductor de un autobús lo quiso sobornar con 400 Lempiras.
El inspector se negó al soborno y el conductor fue sancionado. Además se le decomisó su unidad por esta acción que tuvo lugar en el Boulevard Suyapa de Tegucigalpa casi enfrente de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras.
Foto: Operativo del IHTT frente a la UNAH.
Para corruptos deben existir corruptores y esa es la situación actual en la que nos encontramos, todo el mundo quiere las cosas fáciles, sin esforzarse, se las quieren tirar de vivos, no quieren hacer fila y por eso es el tráfico en la ciudad, por la poca cultura y falta de paciencia de los conductores.
Se están perdiendo los valores, la cortesía, el respeto hacia los demás. No resaltan las buenas acciones, quieren vivir en constante odio y negativismo.
Este inspector nos da una lección de vida muy importante y nos enseña el camino correcto por el cual debemos ir haciéndole frente al día a día.
¡Felicidades inspector!