Un pueblo que elige corruptos no es víctima, es cómplice…

Foto: Diario La Prensa.
  • Domingo, 26 de noviembre del 2017…

El día comenzará con una madrugada diferente a cualquier otro domingo; sin casi nadie en la calle, con silencio, sin operativos ni nada por el estilo. La calma antes de la tormenta.

Será un día diferente, extraño y decisivo para la sociedad hondureña, ya que se realizan las Elecciones Generales, y eso significa que como pueblo nos toca elegir a las autoridades de los próximos cuatro años.

En pocas palabras… ¡Definimos nuestro futuro!

Y digo “Definimos” porque así es. No valen esas típicas frases de que “Mi voto no cuenta”, “Yo no haré la diferencia” y bla, bla, bla.

Créanme, cada marca es importante, y quedarse en casa viendo televisión no es una opción; debemos expresar nuestra forma de pensar a través de nuestra votación.

Foto de Diario La Prensa.
Foto de Diario La Prensa.

Eso sí, no nos dejemos llevar por lo tradicional, hagamos que nuestro voto sea puro y sea un voto con consciencia, alejado de toda influencia posible.

¿Le dieron una bolsa solidaria?
Diga: “¡Gracias!”, Pero si no está de acuerdo con el partido de gobierno (Partido Nacional) simplemente no vote por él y punto.

¿Su familia es “full” Partido Liberal?
¡Bien por ellos! Pero si usted no está de acuerdo con su actual candidato simplemente no vote por él y punto.

¿Forma parte de la oposición y sueña con un cambio?
¡Perfecto! Pero si usted no está de acuerdo con la Alianza simplemente no vote por ella y punto.

Foto: Facebook Alianza de Oposición
Foto: Facebook Alianza de Oposición

Todo depende de nosotros, y no sé ustedes, pero siento que debemos tener presente la siguiente frase antes de dar nuestro voto:

“Un pueblo que elige corruptos, impostores, ladrones y traidores, no es víctima, es cómplice”.
-George Orwell

Si usted considera que un candidato es corrupto, impostor, ladrón o traidor la solución es simple… ¡No vote por él y punto!

Que este domingo seamos los seres más racionales del planeta tierra, que pensemos y pensemos hasta que nos duela la cabeza, pero tomemos una decisión anhelando lo mejor para el país.

Analicemos los últimos cuatro años, las declaraciones de antes y ahora, la actitud de cada uno de los candidatos y pensemos en el futuro.

La Honduras del mañana la construiremos con el voto de hoy.

Mi bella tierra, ojalá el pueblo te brinde el mejor destino.