En la página de Facebook “Rescatista de Corazón” se resaltó el noble gesto que tuvo una señora de la tercera edad con un pobre perrito de la calle.
A la abuelita, que se mira es de muy escasos recursos, una mujer humilde, le habían regalado lo que parecía era un almuerzo o al menos las sobras del mismo, no hay forma de asegurarlo.
Esto a un costado del hotel Clarión de la capital, en donde hay un restaurante de comidas típicas. Pero frente a la señora apareció un perrito que ronda en la zona, quien se paró frente a ella a “velarle” la comida.
Fue aquí donde la señora, en un gran gesto de buen corazón, se quitó el bocado de la boca, como decimos, y le dio el plato de comida al perro, quien ni corto ni perezoso no lo pensó dos veces para degustar del “banquete”.
¿No es la gran cosa?
Pueda que muchos no, pero son pocos quien, teniendo hambre, deja de comer por darle comida a otro que probablemente tiene más hambre todavía y menos si es un animal.
Estos gestos son los que se merecen resaltar, ya que, si en Honduras hay mucha gente que pasan días sin comer, a muchos perritos también les va igual de mal o incluso peor porque ellos dependen de los humanos, no tienen la posibilidad de pedir o comprar comida.
¡Más gestos así!
