El confinamiento ha causado que muchas personas hayan subido unas cuantas libras de más. La falta ejercicio, combinado con la mala alimentación, ha originado que millones de personas alrededor del mundo elevaran un poco su grasa corporal, trayendo consigo una dura meta para acabar con las libras extras en los próximos meses o para cuando acabe dicha cuarentena.
Debido a muchos “gorditos”, los gondoleros de Venecia han reducido la capacidad de sus barcos, adjudicando que el incremento de peso de los turistas que llegan a visitar todos los años ha ido en aumento durante los últimos 10 años y en el largo confinamiento pudo haber incrementado un poco más.
El límite en una góndola que ofrece el recorrido clásico por los canales de la ciudad, se ha reducido de seis a cinco personas, mientras que en una góndola da parada, barcos utilizados principalmente para cruzar el Gran Canal, el número ha disminuido de 14 a 12.
Según estas personas que viven del turismo en los canales de Venecia, las cargas pesadas hacen que el agua ingrese a la embarcación, de igual forma, confirmaron que las góndolas están construidas para transportar solo cinco personas. Así que la sexta persona termina sentada en un lugar sin cojín, ya que el bote solo estaba hecho para cinco.
La imagen clásica de Venecia son sus canales y las góndolas forman parte de su cultura desde 1094, y actualmente hay más de 430 góndolas y 180 profesionales que están capacitados para manejar este medio de transporte que forma parte esencial de la cultura del lugar.
