El Cruz Azul finalmente se proclama campeón de la Liga MX tras haber derrotado a los Santos Laguna con un marcador global de 2-1, tras empatar el partido de vuelta 1-1, pero haber obtenido la victoria en el encuentro de ida por la mínima (1-0) como visitante.
En un partido de mucha tensión y disputa por el balón, Santos Laguna empezó el partido con mayor intensidad, sabiendo que estaban atrás en el marcador. Los santistas debían controlar el juego, anotar gol para ganar en confianza y hacer que a los jugadores azules les empezaran a aparecer esos fantasmas que los ha perseguido en los últimos 23 años.
Transcurrieron los minutos y se miraba a un Cruz Azul con temor, compasivos en la marca y cómodos defendiendo en su área. Poco a poco los visitantes se iban asentando en campo rival, jugando entre línea y precisamente así fue como llegó el primer gol del encuentro. A través de Diego Valdés, los de Torreón se pusieron al frente al minuto 37, tras un zurdazo en la escuadra por parte del chileno y así empataban la serie en la gran final de la Liga MX; terminaba el primer tiempo.
Comenzó un segundo tiempo totalmente distinto a lo que habíamos visto en los primeros 45 minutos. Al parecer la charla de entretiempo de Juan Reynoso hizo despertar a sus jugadores, quienes respondieron de manera muy rápida para igualar el marcador. El ex lagunero, Jonathan “El Cabecita” Rodríguez ponía el 1-1 en el Azteca y tomaba el control parcial del partido con un 2-1 a favor en el marcador global.
Los cementeros gozaron de un par de posibilidades más después del gol y los visitantes no parecían responder ante el inminente bombardeo azul. El tiempo se estaba convirtiendo en el peor enemigo para los Santos, y parecía ser infinito para los capitalinos. El partido llegaba a sus últimos 10 minutos, los locales se replegaban atrás, los dirigidos por Guillermo Almada quemaban sus tres ventanas que les permitía hacer cambios y ponía toda la carne en el asador.
Finalmente, el marcador no se movería más y el árbitro central pitaba el final del partido… ¡El Cruz Azul finalmente se proclamaba campeón de fútbol mexicano! Los cementeros alzaban la tan añorada novena liga del fútbol mexicano, después de 23 años y cinco meses sin poder hacerse del título liguero, terminando así una de las sequías más conocidas en la historia del fútbol tras perder varias finales en años pasados y en circunstancias que parecían nunca ser normales.
