Omoa apunta a la inversión con la construcción de un moderno puerto para cabotaje, marina, carga y cruceros

En los últimos años, Honduras ha sido considerado como uno de los países propicios para llevar inversión y así generar empleo. Su ubicación, lo han convertido en punto estratégico para la comercialización y ser el punto estratégico para el comercio internacional.

Debido a lo antes mencionado, diputados de diversas bancadas del Congreso Nacional aprobaron el contrato de concesión de los servicios marítimos a los buques con la Empresa Nacional Portuaria (ENP), institución que tiene la exclusividad.

Se estará construyendo una moderna Terminal Marítima Portuaria de Cruceros, Marina, Cabotaje y Buques Mercantes, en el puerto de Omoa, la cual, generará solo en su primera fase más de 2,000 empleos entre directos e indirectos.

Cabe destacar que esta concesión no es una Alianza Publico Privada, sino una inversión 100% privada que supera los 2,800 millones de lempiras (120 millones de dólares). Este proyecto fue declarado de interés nacional mediante decreto ejecutivo PCM-039-2020 y publicado en el diario oficial La Gaceta el 22 de enero del 2021.

La mega obra permitirá atraer a empresas e industrias nacionales y extranjeras, así como navieras que habían decidido exportar o importar productos a través de puertos guatemaltecos que ofrecieron mejores tasas y condiciones competitivas.

Además, la obra es clave para el desarrollo social y económico de Omoa, el departamento de Cortés y el país porque llevará un flujo muy importante de turistas a la moderna terminal de cruceros que también estará ahí instalada.

Inversión 100% privada y alta competitividad en la zona

“Esta es una inversión 100% privada, es decir, el Estado de Honduras no va a invertir ni un cinco para la construcción y operación de esta megaobra en el Atlántico”, dieron a conocer Ejecutivos del Consorcio inversionista Inverstport-SC.

Cabe señalar que, el inicio de este proyecta está programado para el mes de septiembre y se espera que entre en operaciones a finales de 2023 o inicios de 2024. Las tres fases de construcción se desarrollarán en un periodo de siete años.

El contrato suscrito con la Empresa Nacional Portuaria promoverá la competitividad, la cual es vital para incrementar el porcentaje de carga que se mueve por vía marítima, tanto en el transporte marítimo regional como en el comercio con los países de Latinoamérica y el mundo.

El diputado Samir Molina explicó que mediante la competencia se podrá reducir el costo de los fletes, volviendo de esta manera los puertos hondureños más atractivos para los inversionistas nacionales y extranjeros. “De eso se trata, de atraer el turismo, de reducir el costo de fletes logísticos, de apoyar la inversión que se traduzca en empleo y oportunidades”.

La comisión dictaminadora la integraron los diputados Mario Alonso Pérez, Juan Diego Zelaya, Felícito Avila Ordóñez, Mario Edgardo Segura, Samuel Madrid, Karen Dinora Ortega Osorto, Edwar Samir Molina Fúnez, Iveth Obdulia Matute Betancourt, Mario Luis Noé Villafranca, Doris Alejandrina Gutiérrez y Rolando Dubón Bueso.

Limitantes debido a la pandemia

Producto de la pandemia Covid-19, el comercio internacional marítimo se ha alterado y los costos operativos se han disparado por el desbalance en los flujos comerciales mundiales. En ese sentido, las líneas navieras han cambiado rutas y algunas inclusive prefieren retornar sus contenedores vacíos a Asia. “Honduras debe mejorar su infraestructura y servicios logísticos” dice el dictamen del Congreso Nacional.

Los parlamentarios recordaron que los demás países de la región hacen lo propio y un ejemplo cercano es El Salvador, donde China ha entrado en escena con fuertes inversiones en los puertos del Pacífico.

Habilitación de la zona Nor-Occidente

La terminal marítima, sumada al proyecto de habilitación del tramo carretero Corinto-Quimistán de 44 Kilómetros de longitud, habilitará toda la zona de Noroccidental al generar tráfico directo hacia Omoa y Puerto Cortés. Con este nuevo tramo carretero se habilita el acceso para que más de 150,000 contenedores provenientes de El Salvador y Guatemala que ahora salen por Santo Tomas de Castilla y Puerto Barrios, tengan una opción más competitiva saliendo por los puertos hondureños en virtud de que una ruta más corta representa menores costos logísticos.

Así mismo, se habilita la zona productiva de Naco con una salida más cercana a los puertos, se libera a San Pedro Sula del tráfico de occidente y Naco con ruta a los puertos y se pone al alcance de los cruceristas que lleguen a Omoa la majestuosa ciudad de Copan Ruinas, ya que podrán visitar por tierra esta joya turística.