Seguimos viajando y conociendo Honduras con nuestra sección Turisteando, donde mostramos los mejores lugares de nuestro país, los mejores platillos típicos, resaltando por todo lo alto la cultura catracha.
Hoy les traemos una bebida típica del sur de Honduras, el famoso pozol. Delicioso manjar, que es preparado por distintas familias, y su receta ha perdurado por muchos años, convirtiéndose en toda una tradición de varios municipios.
No sé ustedes, pero en lo personal, esta bebida tiene que ser degustada en un guacal de jícaro, siendo este, algo tradicional del país, dándole una experiencia diferente por ser algo que no se puede realizar en cualquier parte del país.
El guacal de jícaro o jícara, es un recipiente elaborado por el fruto del mismo nombre, sirviendo como vasija en varias casas, el cual sirve como vaso para tomar agua, pozol u otros líquidos, siendo una gran opción para el medio ambiente.
Son varios los restaurantes, sobre todo en el departamento de Choluteca, que aún mantienen este tipo de utensilios, sorprendiendo a propios y extraños al momento de servir el delicioso pozol, su pajilla y el toque de canela que no puede faltar.
¿Por qué es tan delicioso el pozol?
En Mesoamérica hay varios tipos de pozol, pero el pozol hondureño se puede decir que se distingue del resto. Teniendo un sabor que lo distingue y colocándolo entre las bebidas típicas más deliciosas que han conquistado el paladar hondureño.
Según la historia, Esta bebida rica en nutrientes, fue consumida como alimento por los Mayas, que extendieron su consumo a todo el territorio sur-mexicano y centroamericano, constituyendo, en gran parte de los indígenas mesoamericanos, en un alimento único para soportar el día a día, además de ser afectiva en los días calurosos.
La bebida originalmente se preparaba y se prepara para los indígenas que aún mantienen su legado, con la fermentación del maíz, para luego ser disuelta en agua, y dejada en remojo por al menos dos días, que era tiempo suficiente para consumirla.
En la actualidad, el pozol se prepara con maíz, leche, azúcar y esencias aromáticas, teniendo en cuenta, que algunos prefieren leche semi-descremada a la popular leche completa. Luego a la mezcla de estos ingredientes, se agrega los cubos de hielo, y para darle un toque tradicional, se sirve en un guacal.
Por varios años, esta bebida ha salido del sur de nuestro país, y ha ido conquistando municipio por municipio, posicionándose en los diferentes mercados y sirviendo como bebida hidratante que es apetecida en los tiempos más calurosos.
Sin duda alguna que nuestro país en rico en historia, cultura, y gastronomía. ¿Y a ustedes con qué les gusta acompañar el pozol?
