“No seamos chanchos”, es una campaña que busca ayudar la estética de la zona central de la capital, un problema que afecta el casco histórico de Tegucigalpa desde hace mucho tiempo, que, con la implementación de basureros color rosa, busca resaltar donde puedes depositar tu basura y no tirarla al suelo simplemente.
Decidimos visitar esta zona de la capital, para observar su atractivo histórico, pero también para observar de cerca si los capitalinos han cambiado su actuar y saber si ahora depositan la basura en su lugar como lo debemos hacer todos, por cuestión estética de nuestro país, pero, sobre todo porque es lo correcto, para eso están los basureros, ahora con un llamativo color que no se pierde a la vista.
Aproximadamente a cinco meses del lanzamiento, la campaña ha mostrado un grado de mejoría, aunque en la visita del Youtuber mexicano, Luisito Comunica, remarcó que a pesar de existir la campaña y los letreros que muestran donde puedes encontrar un basurero, aún se podía observar basura de todo tipo por diversas partes.
Por nuestra parte, en la visita constatamos que aún existe una cantidad de basura que permanece tirada en el suelo o en las bancas y no depositada en su sitio, a pesar, de que en la mayoría de postes ubicados en el Paseo Liquidámbar hay un letrero que dice “No seamos chanchos”, debería darnos pena que a pesar de todo el esfuerzo para mantener una ciudad limpia, aún existen “Chanchos” que no comprendan donde debe ir la basura, incluso con un basurero tan cerca, personas decidieron tirar al suelo sus desperdicios a escasos centímetros de uno.
Desde el Parque Central, Paseo Liquidámbar hasta la Plaza Los Dolores, fuimos encontrando a nuestro paso residuos de basura, desde una bolsa con agua o aquella bolsa que en algún momento llevaba las pertenencias de alguien, así como aquel plato desechable que tenía la comida que alimentó a la persona que lo tiró al suelo.
Es necesario comprender que por más pequeña que sea la basura, va sumando de una en una y se irá acumulando, no solo da un aspecto feo e insalubre al centro de la capital, también es la causante de tapar los tragantes de agua y en muchas ocasiones la causante de inundaciones, más en la época de invierno, por eso, ¡No seamos chanchos!, y depositemos la basura en su sitio, en uno de los más de 100 basureros color rosado y letreros ubicados a lo largo del Centro.
Pero no todo es malo, el señor Óscar Aguilar, un lustrabotas de profesión que tiene más de 30 años de experiencia, nos mencionó que: “Antes de que hubiera basureros la gente botaba la basura en todos lados, ahora con las canastas y con los dibujos de los cerdos la gente se está acostumbrando a dejar la basura en su lugar”, lo que nos muestra que si están funcionando.
Siempre recuerda que, si visitas el centro, utiliza los basureros para depositar tu basura y si ves basura en el suelo, trata de recogerla para que uno de los sitios históricos de la capital se mantenga pulcro y sea un atractivo más llamativo para el turismo, tanto nacional como internacional.
Esperamos que las personas sean más conscientes del daño ambiental que causan a tirar la basura en la calle, peatonal, cerca de un negocio, no importa el punto donde la boten, ese no es el sitio, la campaña que busca una noble causa que nos beneficia a todos claramente ha mostrado una mejoría en cuanto a la cantidad de basura que encontrábamos con anterioridad, pero, el problema aún persiste y el llamado es a los ciudadanos para que “No seamos chanchos”.
