Ante la creciente circulación del virus del sarampión en países de la región, las autoridades hondureñas han decidido forzar las medidas sanitarias en los puntos de entrada al país, tanto aéreos como terrestres. La Ministra de Salud, Carla Paredes, confirmó que Honduras se mantiene en alerta sanitaria, pero aclaró que no se contemplan cierres de fronteras ni aeropuertos.
“Estamos en alerta, pero eso no significa que cerremos fronteras. Cualquier ciudadano que venga de países con brotes activos debe presentar su carnet de vacunación si es menor de 10 años”, afirmó la ministra en conferencia de prensa.
Por lo tanto, los menores de 10 años que ingresen al territorio hondureño desde países con brotes de sarampión deberán presentar su carnet de vacunación, en caso de no contar con este documento, se les aplicará la vacuna en el mismo punto fronterizo, sin ningún costo.
La Ministra reiteró que la vacuna contra el sarampión será aplicada de forma gratuita y obligatoria, tanto en hondureños como extranjeros, aclaró además que no se solicitará una prueba negativa del virus, sino únicamente el comprobante de vacunación.

Paredes explicó que la Secretaría de Salud mantendrá coordinación y actualización constante con el Instituto Nacional de Migración (INM), agencias de viaje, Marina Mercante y agentes aduaneros, especialmente en las fronteras terrestres con naciones que presenten brotes activos.