El mediocampista hondureño Kervin Arriaga volvió a demostrar su entrega total con el Levante UD en el partido frente al Real Oviedo. El catracho recorrió 10.96 kilómetros, convirtiéndose en uno de los jugadores con mayor recorrido del encuentro, apenas por detrás de Manu Sánchez (10.97 km).
Este tipo de actuaciones consolidan a Arriaga como una pieza clave del Levante, donde su esfuerzo y determinación se convierten en un ejemplo para sus compañeros. Cada partido demuestra que su presencia es fundamental tanto para el rendimiento colectivo como para mantener la intensidad del equipo durante los 90 minutos.
Se destacó por su solidez en el centro del campo, completando un 86% de sus pases e igualando a su compañero Carlos Álvarez en recuperaciones de balón. Esta actuación fue significativa para el triunfo del Levante, poniendo fin a una racha de malos resultados y consolidando a Arriaga como titular en el esquema del entrenador.
Más allá del impacto en el Levante, Arriaga sigue dejando en alto el nombre de Honduras en el fútbol europeo. Su entrega y profesionalismo reflejan que el trabajo constante y la disciplina son elementos esenciales para destacar en el competitivo mundo del fútbol internacional.
