¡La gloria es azul profundo! Motagua suma su copa 17

Foto de Frank Aguilera.

¡Se acabó el Clausura 2019! Así que ya tenemos campeón…

Este domingo en el Estadio Nacional de Tegucigalpa se disputó el partido de vuelta de la gran final, la cual fue protagonizada por la rivalidad más grande del fútbol hondureño.

El Olimpia como “Home-club” recibió al Motagua, y tras el empate 2-2 en la ida el panorama era claro: El que ganara el juego se quedaba con el campeonato, y así sucedió.

  • Partido de vuelta / Gran Final
    Domingo, 2 de junio del 2019
    Olimpia 0-1 Motagua
    Estadio Nacional, Tegucigalpa
    Global: 3-2 a favor de los azules

https://youtu.be/-PADqOqSqFE

Desarrollo del Partido:
Olimpia 0-0 Motagua
Olimpia 0-1 Motagua (Roberto Moreira, 18′)

De la tarde en sí se pueden señalar muchas cosas, pues el partido comenzó casi 25 minutos tarde por un problema que hubo en camerinos, ya que los familiares de los azules no tenían credenciales y por lo tanto no podían estar en ese sector ni en la cancha.

Bueno, es un asunto muy complejo, así que no nos quebremos la cabeza y hablemos únicamente de lo deportivo.

El balón se movió y durante 17 minutos todo estaba muy parejo, hasta que llegó la jugada clave que marcó el resultado final.

Foto de Frank Aguilera.
Foto de Frank Aguilera.

Olimpia tenía el esférico e intentaba salir con el control del mismo, pero Matías Galvaliz cometió una falta que el árbitro Armando Castro no señaló; posteriormente los azules agarraron mal parada a la defensa merengue y fueron letales.

El delantero Roberto Moreira recibió el balón, y en un mano a mano no falló, colocando el 0-1 del encuentro.


A TOMAR EN CUENTA: El árbitro Armando Castro no señaló un claro penal a favor de Motagua por falta en contra de Denil Maldonado. Esta acción se dio antes de la única anotación del partido.


Foto de Frank Aguilera.
Foto de Frank Aguilera.

Después el equipo dirigido por Diego Vázquez técnicamente hizo lo que quiso, pues manejó muy bien la situación, conscientes de que Olimpia buscaría empatar con intensidad.

La clave fue presionar a la altura del medio campo para obligar a los blancos a dividir el balón, y esto al final funcionó, tanto así que incluso el Motagua pudo marcar otro gol, pero no fue eficiente en sus contragolpes.

El tiempo pasó y el marcador no cambió, así que las “Águilas” se mantienen en lo más alto, alcanzando su copa número 17 y el bicampeonato en el torneo local.

¡Felicidades, seguidores azules! Siguen siendo los monarcas del fútbol catracho.

Foto: Frank Aguilera
Foto: Frank Aguilera
Foto: Frank Aguilera
Foto: Frank Aguilera