Richard Pringle vivió el dolor más profundo que puede vivir un padre: ver morir a su hijo Hughie, de solo 3 años, debido a una hemorragia cerebral.
A un año de su muerte, este padre compartió en Facebook un conmovedor testimonio en el que enseña las “10 cosas más importantes que aprendió desde que perdió a su hijo”, una nota que no dejó a nadie indiferente en Internet.
1. Nunca se puede besar y amar demasiado.
2. Siempre hay tiempo: Dejá de hacer lo que estás haciendo y jugá, aunque sea solo por un minuto. Nada es tan importante que no puede esperar.
3. Tomá tantas fotos y grabar tantos vídeos como sea humanamente posible. Un día eso podría ser todo lo que tenés.
4. No gasten dinero: pasen tiempo; ¿Creés que lo que gastas importa? No es así, lo que hacés importa. Saltá en los charcos, ve a caminar. Nadar en el mar, construir un campamento y divertirse. No puedo recordar lo que le compramos a Hughie. Sólo puedo recordar lo que hicimos.
5. Cantá: Canten canciones juntos. Mis recuerdos más felices son de Hughie sentado sobre mis hombros o sentado junto a mí en el coche cantando nuestras canciones favoritas; los recuerdos se crean en la música.
6. Apreciar la más simple de las cosas: Horarios nocturnos, hora de dormir, leer historias. Cenas juntas. Domingos perezosos. Apreciar el más simple de los tiempos. Son lo que más echo de menos. No dejés que esos momentos especiales te pasen por.
7. Siempre besa a los que amás y si lo olvidás, volvé y besala; nunca sabés si es la última vez que tendrás la oportunidad.
8. Hacer que las cosas aburridas sean divertidas: Viajes de compras, viajes en coche, caminando a las tiendas. Ser tonto, contar chistes, reír, sonreír y disfrutar. Sólo son tareas si las tratás así. La vida es demasiado corta para no divertirse.
9. Guarda un diario: Escribí todo lo que tus pequeños hacen que ilumina tu mundo. Las cosas graciosas que dicen, las cosas lindas que hacen.
Sólo empezamos a hacer esto después de perder a Hughie. Queríamos recordar todo. Ahora lo hacemos por Hettie y nosotros también por Hennie. Tendrás estos recuerdos escritos para siempre y cuando tu mayor puedas mirar atrás y apreciar cada momento.
10. Si tienes a tus hijos contigo para besar en las buenas noches, para desayunar, para caminar a la escuela, para llevar a la universidad, para ver cómo se casan; entonces eres eres bendecido. Nunca jamás olvidés eso.