Saúl Flores de condimentos ‘La Típica’: “La perseverancia me llevó al crecimiento”

Querer es poder, y mediante el arduo trabajo los sueños se vuelven en una realidad. Saúl Flores ha trabajado muy duro, hasta llegar a concretar todas sus ideas. Flores es un emprendedor muy exitoso, y ha sobresalido en el mundo de las especias, por medio de su marca La Típica, que se especializa en la elaboración de condimentos especias, cominos, achote, entre otros.

A sus 62 años de edad y casado con Ventura Carrasco de 64 años, con, quien procreo 4 hijos: dos mujeres y dos varones, aún recuerda con tristeza lo duro que fue el inicio de su negocio, debido a la falta de un mercado seguro y precios injustos.

A pesar de la dificultad y adversidades que tuvo en este negocio, don Saúl no se dio por vencido. Tras años de duro trabajo, logró posicionarse en el mercado, hasta encontrar los aliados correctos y sobresalir en este mundo inmenso que tienen las especias.

“Solo un hijo está trabajando conmigo, Franklin, los demás han tomado cada uno su camino”, dijo don Saúl, quien se dedica al negocio desde que tenía 22 años de edad y con el fruto de su esfuerzo logró sacarlos a todos adelante.

El negocio no solo es una bendición para su familia, sino para decenas de trabajadores que directa o indirectamente viven de la producción y comercialización de condimentos. Hoy es una persona exitosa, económicamente ha crecido mucho. “Generamos unos 15 empleos directos, más otros 20 indirectos, de los cuales el 50% son mujeres”, indicó.

¿Cuál fue la clave de su éxito? Don Saúl afirma que fue haber tomado las oportunidades que se presentaron para establecer una relación comercial a través del mercado formal. Es así, se le brindó la oportunidad de llevar a sus especias y condimentos a la mayor cadena de supermercados de Honduras. “Vi en un Walmart un mercado de oportunidades, yo debo reconocer que ellos nos ayudaron a crecer y ser sostenibles en el tiempo”, recalcó.

Actualmente, sus productos los entrega a Walmart, en sus cuatro formatos de tienda, desde hace 8 años y desde entonces, su negocio dio un giro hasta alcanzar el éxito. Haber tomado esta oportunidad, abrió decenas de puertas, manteniendo a flote uno de sus emprendimientos más soñados.

Don Saúl mantiene vivo el recuerdo los primeros meses que se le permitió ingresar con 2 presentaciones de especias y solo en cuatro tiendas: Paiz Miraflores, Kennedy, Centro y Walmart Fuerzas Armadas. Hoy, 8 años después de haber tomado la decisión, se alegra mucho al informar que sus productos hoy están disponibles en casi todas las tiendas a nivel nacional y en estos últimos meses la demanda ha subido considerablemente.

Todo esto ha sido gracias a “Una Mano para Crecer”, un programa de Walmart que desde 2007 apoya a la pequeña empresa hondureña. Como iniciativa de Valor Compartido, impulsa el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas (PyMES) manufactureras, con especial atención en el empoderamiento económico.

“Para mí Walmart es el mejor cliente de toda Honduras, me ayudó a crecer en mi vida personal y familiar. Gracias a Dios nuestros productos han tenido una gran aceptación en todos los formatos, ya que son de alta calidad, precios accesibles y en algunos casos por ser la única opción con productos diferenciados.”, aseguró.

Actualmente este novedoso programa beneficia a 464 pymes en Centroamérica, de las cuales, 64 son hondureñas que generan 960 empleos. De estas pymes nacionales, el 18% producen abarrotes, el 8% son de consumo, el 2% de mercancías generales, el 17% perecederos y el 3% textil.