¿Qué se necesita para ser periodista: Estudiar, actuar o subir vídeos XXX?

Estoy a pocos días de recibir mi título universitario como LICENCIADA EN PERIODISMO, y eso me llena de mucha emoción.

No porque me va hacer una mejor persona o una mejor profesional, mucho menos me va a dar una inteligencia superior y nunca antes vista, pero ese papel, cartón o como usted lo quiera llamar, es como la cereza del pastel.

En vez de pastel, yo lo llamaría del sacrificio, sí del sacrificio, no sé cuántos se van a identificar conmigo, pero estoy segura que muchos, y no solo de mi gremio, sino que doctores, abogados, maestros, psicólogos en fin, todo aquel que quiere ser un excelente profesional y salir adelante.

Porque  muchas veces andábamos eran 13 lempiras para el colectivo, o cuatro para el bus, y que si nos tocaba llevar clases mañana y tarde, pues también nos tocaba aguantar hambre.

O el sacrificio de nuestros padres para poder mandarnos a estudiar.

Me llena de cólera, indignación, frustración e impotencia saber que muchos compañeros y amigos andan buscando trabajo y no encuentran, porque esas plazas o puestos están ocupadas por mujeres u hombres que hacen el ridículo y de esa manera es más que suficiente para colocarse en un puesto.

Tal parece que ahora es más que suficiente hacerse la sufrida un par de minutos y listo… ¿Se ha puesto a pensar usted cuántos indignados habremos?

La mayoría de nosotros hemos sido víctimas de asaltos y no necesariamente nos robaron el pasaporte.

Pero es tanta nuestra ignorancia que ponemos en un altar a esas personas, me disculpan  con lo que voy a decir, pero no es lo mismo  que una niña mimada me venga hablar de la situación en el país, que alguien que viene de abajo y ha luchado por superarse, que a las seis de la tarde tiene que estar encerrado en su casa, porque si no lo matan.

Grábase bailando o diga incoherencias para que a usted la contraten.

Y si eso no le funciona, suba un vídeo por “equivocación”, donde está teniendo sexo con su pareja y al mismo tiempo haga como que si la están maltratando. ¡Uff, la rompió!

Y así puedo seguir con muchísimas cosas que parece que ahora es necesario hacer para ganarse un puesto en los medios de comunicación.

No es envidia, créanme que no, no me gustaría estar en su lugar  y tener que hacer el ridículo una y otra vez, que me tengan por mis “atributos” como figura decorativa, a que me tengan por lo que pienso, porque pueda analizar una noticia, porque pueda transmitir emociones, donde pueda ser foco para dirigir y orientar una sociedad.

Entonces ahí es donde me pregunto: ¿Valió la pena estudiar cuatro años o era más fácil el asunto?

No es posible que como gremio periodístico, o como personas estemos apoyando esto, y esto va desde el televidente que le gusta ver cómo mueve el trasero, o cuando se ponen a contar su vida íntima con todos los detalles.

POR FAVOR, no sigan denigrando esta bella profesión, es un insulto que hagan esto, y denle oportunidad a todos los que estudiamos y amamos esto con sacrificio.