¿Messi o CR7? ¡Ambos son unas bestias!

Es increíble como la mayoría de las personas se van al borde de los puños por imponer su criterio de si Messi es mejor que Ronaldo o viceversa. La verdad, el fútbol es un deporte donde muy pocas veces existen dos fenómenos a la vez.

Un ejemplo claro es la estúpida comparación de quién fue mejor: Pelé o Maradona. Ambos fueron unos genios del fútbol. Pelé ganó tres copas del Mundo, Maradona una sola. Pelé anotó más de mil goles y Maradona la mitad. Son dos personas en dos épocas muy distintas.

Pelear por CR7 y Messi no es más que buscar la excusa perfecta para sacar las frustraciones personales de cada quién y lucirse con millones de caracteres con argumentos inventados e impositivos. Ambos son unas máquinas haciendo goles, driblando, haciendo pintas y dejando en ridículo al rival. Dentro de unos años esto se acabará y no tendremos a dos jugadores de otra galaxia.

Lo de Messi es más nato, sin embargo, en su era, en su época hay alguien que no se cansó de entrenar, no bajó la cabeza, siguió hasta conseguir ponerse al lado del mejor del mundo y ahora la “pelea” es increíble. Un duelo fantástico que quizá jamás nunca en la vida lo volvamos a ver.

Lo de Ronaldo este año en Champions es “desastroso” dos hat tricks en fases seguidas de eliminación directa en Champions. Diez goles en 11 partidos. Está a punto de llegar a 400 goles con el Real Madrid y es el jugador que tendrán que superar todas las generaciones venideras de futbolistas que vistan esa camiseta. El 7 de Ronaldo es eterno, tendrá un peso monumental para el próximo jugador que quiera llevar ese número en la espalda.

Es el mismo caso con Messi, un señor del balón, un semidiós del fútbol. Todo aquel que se atreva a llevar el 10 en la espalda en el Barca tendrá que ser al menos la mitad de buen jugador que Lio.

Las peleas déjenlas para los sin cerebro. La recomendación es disfrutar de la mejor época del fútbol. No se amargue mucho, porque por ahí CR7 se lleva la orejona 12 con el Madrid y ganará su quinto balón de oro.

Como dice aquel español: “¡Que viva la madre que los pario Messi y Ronaldo!