Ayer fui al supermercado con mi mamá a comprar las cosas que se necesitan en la casa, como siempre ir al “super” con mi mami es algo épico donde uno desarrolla la paciencia en su máximo esplendor, mira la etiqueta de cada producto para al final decidirse por el producto que siempre lleva.
Después de horas y horas de estar ahí, por fin llegamos a la caja y en eso me dice: “Karla, se me olvidaron las candelas, traelas por cualquier cosa” (refiriéndose al domingo).
Me voy al pasillo donde normalmente están y no miro nada, probablemente las cambiaron de estante, en eso le pregunto a una muchacha de las que ayudan.
-“Disculpe, ¿dónde están las candelas?”.
-Fíjese que están agotadas, no tenemos.
Pagamos y nos fuimos, claro mi mamá alegando y diciendo.
-¿Cómo es posible que en un supermercado no tenga candelas? O fijo ni preguntaste vos.
Bueno para no hacerles largo el cuento nos paramos en tres supermercados más a buscar las benditas candelas y en ninguno encontramos, luego nos fuimos a Banasupro y tampoco las candelas están agotadas señores.
¿Qué onda con la gente?
Se pasan de alarmista o en realidad se va a poner fea la cosa después del domingo.
De verdad espero que sea solo show de la gente y que por el bien de todos se lleve una fiesta democrática en paz.
Que respetemos al ganador y que no repitamos la misma crisis del 2009 porque ni hemos terminado de salir de ahí para entrar de nuevo.
Mientras tanto creo que yo seguiré buscando candelas con mi mami.
