¡Qué linda es mi tierra! El calor humano y el trato de los vendedores a los clientes, además de la exquisitez de la comida, hicieron que la feria de San Miguel fuese todo un éxito.
Desde que salió el sol hasta que la luna arropó las calles de nuestra Tegucigalpa, y la feria de comida terminaba al ritmo del “curruchunchun”, y con la famosa “vaca templada”, miles de personas, muchas de ellas extranjeras, disfrutaron de un evento sin igual.
Todo esto parece una fábula, pero las cuerdas y los fuegos pirotécnicos iluminaron las calles del Guanacaste exactamente frente al famoso Mercado “San Miguel” donde la fiesta comenzó desde tempranas horas.
La noche fue la más esperada por los famosos “toro fuego” que pusieron a prueba la valentía de los que corrían de un lado a otro mientras la pirotecnia hacía de las suyas.
El Cuerpo de Bomberos estuvo pendiente de toda la actividad, mientras los espectadores abarrotaban las calles de este sector.
Foto: El Cuerpo de Bomberos superviso de pies a cabeza la pirotecnia y mantuvo a las personas guardando una distancia adecuada.
¡Qué bonito es ver a las familias y parejas reunidas en un lugar donde solo se respira alegría y las puras ganas de vivir para seguir trabajando y esperar un año más para seguir con la fiesta de San Miguel y llenar de color nuestra capital!
