Padre Juan Ángel: “Amarillistas publican videos de asesinatos”

QUE NOS AGARREN CONFESADOS

Por padre JUAN ÁNGEL

Las últimas semanas, más que otras, hemos vivido una verdadera montaña rusa con todo lo que se ha sabido, a partir de la publicación de una “supuesta” conversación entre superiores de la policía, que actuaban en contubernio con “presuntos” narcotraficantes para quitarle la vida a personas que luchaban por adecentar nuestro país, y algunos otros crímenes que resultan en un “terrorismo” de los más despiadados al pretender callar voces o controlar a los que generan opinión.

Aclaro que lo de “supuestos” y “presuntos” es porque no puedo comprometer al medio en el que escribo. Aquí lo denigran o lo querellan a uno hasta por menos.
Justamente, hablando de querellados, nos ha herido profundamente ese asunto de la “machaca”. Admito que a lo largo de los años ese asunto ha tenido diversos nombres: “cariñito”, “aportación”, “pa’ los chicles”, etc.

Eso de que le paguen a los periodistas, no es nada nuevo. Desde que surgieron los periódicos en Honduras, siempre hubo periódicos que apoyaban el régimen de turno y recibían sus dádivas por el asunto.

Lo cierto, y cuidadito me salen con falsos pudores y defensas del gremio que no le quedan bien a quien se quiere ganar el cielo y no unos cuantos dineros, es que desde que retornamos a la “vida democrática”, este fenómeno se agudizó y generalizó.

A mi de pequeño me enseñaron que “cuando el río suena, piedras lleva” y la sequía no la han sufrido los dueños de algunos medios, levantados con una velocidad mayor que la de Lázaro y de algunos periodistas que lo único que tienen de eso es que, periódicamente pasan por sus dineros en las dependencias del Estado o con algunos “empresarios” a los que han extorsionado o que quieren tenerlos “bajo sus alas”.

No es de este gobierno, ni de hoy. Es de siempre.

Por otro lado, y lo digo con profundo dolor, me ha sorprendido ver medios que consideraba serios, publicando en las redes sociales fotografías de asesinados en la zona norte, con una desfachatez que sobrepasa los límites del amarillismo.
¿Dónde quedó el respeto por la dignidad de la persona humana? Hasta la publicación de los videos de los asesinatos, por más que le pongan esa “advertencia” que puede ofender la susceptibilidad de algunos, son grotescos.

¿Han pensado en las madres y los hijos de esas personas?

Son seres humanos, merecen respeto. ¿Que los videos o las fotografías son útiles para encontrar los criminales? claro que lo son para encontrar a los susodichos, pero sinceramente es ofensivo que no le tapen el rostro a las víctimas.

La semana pasada escribí que en el territorio de mi parroquia habían asesinado un par de miembros de nuestras comunidades y ahora es que se volvió zona de guerra.

Asesinaron a otros, hirieron a varios y en fin ahora hasta bautizaron el lugar como “la esquina de la muerte”. No es justo. No merecemos vivir de esa forma. Con ese terrorismo que paraliza.

Pero, ¿qué se puede esperar? Si mientras los noticieros casi consiguen patrocinadores para la “masacre del día” y luego acusan a este o aquel, acto seguido idolatran la vida de los narcotraficantes con sus novelas.

¿No entienden que al presentarlos como si fueran Robin Hood o el Cid Campeador, los vuelven modelos apetecidos de los jóvenes? Por favor, dejen de pasar esos “culebrones” que están educando para el crimen a nuestra sociedad.