La Revo y la Ultra Fiel se dieron con todo… al ritmo de los tambores

El domingo 10 de febrero de 2019 quedará registrado como el primer clásico del año entre Motagua y Olimpia, el resultado, empate a un gol, pero más allá del resultado, hay que hablar de lo externo, lo que se vivió en las gradas del Estadio Nacional Tiburcio Carías Andino.

Previo al partido, en las respectivas locaciones, tanto la Revo (Motagua), como la Ultra Fiel (Olimpia) estaban animando con tambores, bombos, la garganta, papel picado, trompetas, entre otras.

Todo esto, era solo el anuncio de que el coloso capitalino sería una fiesta, solo faltaba que sonará el pitazo inicial y que los jugadores dieran un buen partido.

Mientras los jugadores calentaban amabas barras alentaban sus jugadores con el “Vamos Azules” con humo azul y del otro lado el “Dale León”. Empezó el encuentro y todo seguía igual, ambas barras alentando, cada uno intentando empujar a su equipo hacía la ruta del gol y de la victoria, no importaba dejar la garganta, la recompensa sería grande.

Luego, durante el entretiempo empezó la “guerra” entre ambas barras con cantos al ritmo de los bombos, entre otras parte de la batería, trompetas, con humos de colores, globos, camisas afuera, banderas, saltando, las personas moviéndose de izquierda a derecha, de derecha a izquierda,  creando toda una fiesta en todo el Estadio Nacional, durante casi 10 minutos.

Con esto ganan los equipos, gana la afición que llegó al estadio, las personas que graban con sus celulares y hasta a sus amigos y familiares analizan a volver a los estadios, nosotros los medios haciendo el llamado de que las personas vuelvan al estadio a disfrutar de una fiesta, una diversión sana.

Esperemos que los clásicos entre Motagua y Olimpia, Olimpia y Motagua sigan siendo llevados a cabo con toda la normalidad posible, con paz, que la única “guerra”, “lucha”, “batalla” sea por ver quién canta más, quién alienta más, quién lleva más gente al estadio, quién hace mejor espectáculo tanto entre los jugadores como entre ambas barras.

Por el fútbol nacional. Para que vuelvan las familias al estadio. Por Honduras… ¡Vivamos el fútbol en paz!