En Honduras tenemos el honor de ser parte de los pocos países donde habitó la civilización Maya. Esta cultura realizó varios avances, destacando en el mundo de la ciencia, con grandes aportes que hasta el día de hoy se siguen utilizando.
Hace unos días, con nuestros amigos del Instituto Hondureño de Turismo, visitamos este destino turístico, donde resaltamos el sitio arqueológico, el Parque de Aves Macaw Mountain, El Paseo de Girasoles, las aguas Termales Luna Jaguar, y el emocionante Festival del Chile.
En la visita al parque arqueológico conocí a un señor de la tercera edad, quien estaba sorprendido por todo lo que había logrado esta civilización. ¿Cuál era su nombre? La verdad no lo recuerdo, se lo pregunté, pero en la premura de estar haciendo fotos y en la breve plática que tuvimos se me olvidó.
¿Es primera vez que viene? Le pregunté, y él me dijo que sí. Junto a su familia habían organizado una excursión desde Jesús de Otoro, y estaban apreciando cada detalle y cada piedra que sobresale de las diferentes esculturas en el sitio arqueológico.
Resaltando entre la multitud por su característico sombrero de la gente que vive tierra adentro, seguimos nuestra plática, destacando ¿Cómo? ¿Por qué? Esta civilización había confeccionado todo lo que podemos ver actualmente.
Ojo, quise explicar a mi manera y con lo poco que sé de ciertas cosas. “Soy periodista”, le dije. Lo que se es porque he leído un poco, ya que el tema de civilizaciones que habitaron Mesoamérica me llama bastante la atención.
Subimos donde está el campo de pelota, y él seguía maravillado de todo lo que lograba ver. Su primera vez en el sitio arqueológico estaba yendo de maravilla, y se podía observar en su interés por querer saber todo.
Mientras teníamos nuestra plática, yo aprovechaba a tomarle fotos, él nunca se dio cuenta, ya que, siempre estaba de espaldas, maravillado por el gris de las piedras, el verde del césped y la bulla de las diferentes parejas de guacamayas.
Al final me deseo un feliz día y él siguió con su visita. En este viaje entendí el verdadero significado del turismo interno, y por qué todo hondureño debe de visitar este tipo de sitios, para poder hablar de maravillas de nuestro país, y no envidiarle nada a ningún otro.
¿Hay una edad para conocer nuestros lugares turísticos? No, la verdad tenemos la obligación de poder hacer turismo a cualquier edad, ya que, son logros pequeños, pero que llenan el alma y corazón por conocer un poco más nuestra patria.
El turismo va más allá de la edad, la raza y el partido político. Todos somos embajadores de nuestro país, es por eso, que tenemos que cuidar, proteger y dar a conocer todo lo bueno que tiene esta gran patria. En fin, “don señor” es un ejemplo que nunca es tarde para conocer Honduras.
